En la última semana de marzo la tasa de interés promedio cobrada por los bancos en créditos de consumo finalizó en 17,8% anual. Esta cifra es la de menor nivel desde el año 2002, que es el primer registro que tiene el Banco Central. En todo marzo promediaron 23,3%, lo que también es el menor nivel desde octubre de 2004.
Según indica El Mercurio de hoy, en ello habría incidido el bajo dinamismo de los créditos en un mes que, por lo general, suele ser uno de los más activos para el sector y en el que intensifican las campañas de colaciones.
Desde la industria reconocieron una menor demanda de financiamiento, dada la mayor cautela de los clientes a la hora de endeudarse y afirman que persiste un ambiente de incertidumbre, producto de que la economía se mantiene desacelerada, pese a los incipientes «brotes verdes» que destaca la autoridad.
En tanto, en banca masiva, señalaron que sus clientes perciben una marcada preocupación por mantener un orden en sus finanzas personales y destinar los fondos a salud, educación y hogar, en desmedro de gastos no primarios como viajes, autos e inversión, acorde a la coyuntura económica actual.
Roberto Méndez, presidente de GfK Adimark, afirmó que a la menor demanda se agregan las mayores restricciones de la banca, alineadas con un proceso de cambio hacia segmentos socioeconómicos de menor riesgo.
De esta manera, marzo de 2015 -a diferencia de otros años anteriores-, se caracterizó por las poco agresivas campañas para publicitar financiamiento masivo y por un lento movimiento en términos de colocaciones, según reconocen agentes del mercado.
Algunos estiman que en lo que va del año el crecimiento de los créditos en cuota debe estar entorno al 1,2%. Otros, más optimistas lo sitúan expandiéndose en torno a 4%, cifra por debajo del promedio de 9% de 2014. (Emol)