Rusia lanzó la noche de este miércoles una ola de misiles y drones contra Ucrania en uno de los mayores bombardeos de este año, nuevamente dirigido a la infraestructura eléctrica, causando apagones y muertes de civiles en varios lugares del país. En cierto sentido, como destacó el experto militar británico David Hambling en la revista Forbes, esto es más de lo mismo, ya que el Kremlin ha estado realizando este tipo de ataques durante varios meses. Pero los misiles utilizados esta vez, y el éxito mixto de Ucrania al derribarlos, ha dado lugar a nuevas súplicas de mejores defensas aéreas. “Si Rusia puede desplegar cantidades de sus nuevos misiles hipersónicos, el juego puede estar a punto de cambiar”, advirtió Hambling.
El ataque, señala la agencia Bloomberg, forma parte de la estrategia del Presidente ruso, Vladimir Putin, de apuntar a infraestructura civil como la red eléctrica, hospitales, escuelas y edificios residenciales. “El enemigo disparó 81 misiles en un intento de intimidar a los ucranianos de nuevo, volviendo a sus tácticas miserables”, dijo el Presidente ucraniano Voldymyr Zelensky en Telegram. “Los ocupantes sólo pueden aterrorizar a los civiles. Eso es todo lo que pueden hacer. Pero no les ayudará. No evitarán la responsabilidad por todo lo que han hecho”, enfatizó, tras informar que los ataques rusos afectaron a 10 de las 27 regiones de Ucrania, con un saldo de al menos nuevos muertos.
El general Valeriy Zaluzhny, comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania, dijo que Rusia había lanzado 81 misiles de diferentes variedades desde aire, tierra y mar, además de ocho drones de ataque Shahed-136/131 fabricados en Irán. Cuatro de los drones y 34 de los 48 misiles de crucero rusos Kh-101/Kh-555 y Kalibr fueron interceptados, aseguró Zaluzhny, vía Telegram.
Las fuerzas de defensa aérea también impidieron que ocho misiles aéreos guiados Kh-31P y Kh-59 alcanzaran sus objetivos, enfatizó el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania, citado por Ukrinform.
“Una de las cosas que se destaca es la gran variedad de municiones involucradas. Parece que Rusia está lanzando todo lo que puede en el bombardeo, y es una bolsa mixta”, escribió Hambling en Forbes. Una opinión compartida por el coronel Yurii Ihnat, portavoz de la Fuerza Aérea de Ucrania, quien señaló: “El enemigo utilizó un amplio espectro de armas. ¿Por qué están haciendo esto? Para distraer a las unidades de defensa aérea. Llevaron a cabo un ataque con varios tipos de aviones y embarcaciones de la Flota del Mar Negro desde todos los frentes, desde tres mares, básicamente: el Mar Negro, el Mar de Azov y el Mar Caspio”.
Pero la mayor sorpresa, y la mayor preocupación para Ucrania, fue la andanada de no menos de seis misiles hipersónicos Kinzhal lanzados desde el aire, todos los cuales lograron atravesar las defensas de Ucrania, según reconoció Zaluzhny. “El ataque fue realmente masivo”, agregó Ihnat, en declaraciones dadas a la televisión.
“Solo se han identificado previamente un puñado de ataques de Kinzhal en todo el conflicto, incluido uno que, según se informa, cayó en territorio ruso en septiembre”, destacó Hambling. “No puedo recordar que muchos misiles Kinzhal hayan sido lanzados a la vez durante esta guerra. El enemigo no tiene muchos de estos misiles, estamos hablando de decenas (según información de inteligencia, tienen hasta 50 de ellos)”, complementó Ihnat.
Igor Konashenkov, vocero del Ministerio de Defensa de Rusia, reconoció el uso del temido misil en los bombardeos llevados a cabo la noche del miércoles. “Las armas de precisión de largo alcance, aéreas, marítimas y terrestres, incluido el sistema de misiles hipersónicos Kinzhal, alcanzan elementos clave de la infraestructura militar de Ucrania, empresas del complejo militar-industrial, así como instalaciones energéticas que les suministran energía”, apuntó.
Según CNN, Rusia utilizó el misil Kinzhal con capacidad nuclear, que ha descrito como un arma hipersónica, en algunas ocasiones durante las primeras semanas de su invasión del año pasado. Pero rara vez se ha visto esta potente arma sobre los cielos del país. Su primer uso conocido fue el pasado mes de marzo, y luego en mayo, según el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS).
“El uso de un armamento tan amplio e impredecible parece marcar un cambio en la estrategia del Kremlin”, comentó Rob Picheta, columnista de la cadena de televisión estadounidense.
El Kinzhal es una variante lanzada desde el aire del misil balístico de corto alcance (SRBM) Iskander, que también se ha utilizado con más frecuencia en Ucrania, y que fue presentado por Putin en 2018 como piedra angular de un arsenal ruso modernizado. Versiones oficiales indican que ya el año pasado, las fuerzas del Kremlin usaron este tipo de armas, en agosto: “Y las tres veces mostró características brillantes”, según palabras del ministro de Defensa, Serguei Shoigu.
Como prácticamente todos los misiles balísticos, el Kinzhal es hipersónico, lo que significa que viaja al menos cinco veces la velocidad del sonido, pero también es particularmente difícil de detectar porque puede ser lanzado desde aviones de combate MiG-31, lo que le da un mayor alcance y la capacidad de atacar desde múltiples direcciones, consigna CNN.
“El Kinzhal (‘Daga’) es una de las superarmas de nueva generación más publicitadas de Putin, diseñada específicamente para contrarrestar las mejoras en las defensas antimisiles de Estados Unidos”, señala Hambling.
Los misiles hipersónicos, según el experto británico, no son necesariamente más rápidos que los misiles balísticos tradicionales, pero mientras que los misiles balísticos siguen una trayectoria alta y predecible como una bala de cañón, los hipersónicos pueden maniobrar dentro de la atmósfera. Esto significa que los misiles balísticos se pueden detectar a larga distancia y trazar un punto de intercepción con mucha anticipación, pero los hipersónicos se mantienen más bajos, dan menos advertencia y no siguen un camino predecible.
RUSIA: «REPRESALIAS A INCURSIONES UCRANIANAS»
El Ministerio de Defensa de Rusia admitió que el bombardeo aéreo que golpeó este jueves varias regiones de Ucrania fue una represalia por la reciente incursión ucraniana en la región fronteriza rusa de Briansk.
«En respuesta por las acciones terroristas organizadas por el régimen de Kiev el pasado 2 de marzo en la región de Briansk, el Ejército ruso asestó en venganza un ataque masivo«, aseguró en su parte diario el general Igor Konashenkov, vocero de Defensa.
Konashenkov precisó que Moscú empleó armamento de precisión de largo alcance, disparado desde el aire, con el que golpearon la infraestructura e industria militares, y la red energética civil.
En su momento, Mykhailo Podolyak, asesor del jefe de la Oficina del Presidente ucraniano, negó cualquier implicación de Kiev en el supuesto sabotaje ocurrido en la localidad rusa de Briansk, acusaciones que tachó de «provocación deliberada».
Algunos medios como el diario «The Washington Post», apuntaron que el denominado Cuerpo de Voluntarios Rusos, un grupo de combatientes enemigos del Kremlin, se habría atribuido la responsabilidad de ese ataque.
A su vez, el general ruso anunció este jueves el empleo de los Kinzhal, lo que fue confirmado por Kiev, quien estimó en seis los misiles hipersónicos de esa clase lanzados contra territorio ucraniano.
Los Kinzhal (Daga en ruso) son misiles de emplazamiento aéreo que tienen un alcance de más de 2.000 kilómetros y una velocidad diez veces mayor que el sonido. Este misil hipersónico de alta precisión puede portar tanto ojivas nucleares como cargas convencionales.(La Tercera Bloomberg EFE)