El Presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, llamó a una «rebelión nacional» contra la aplicación de la Carta Democrática invocada este martes por el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, a quien le dijo que se meta el documento por «donde le quepa».
«La Carta Democrática la pueden poner así (…) ponerla en un tubito bien fino y darle mejor uso, señor Almagro. Métase su Carta Democrática por donde le quepa, a Venezuela se respeta y a Venezuela no se le va a aplicar ninguna carta. Llamo a la rebelión nacional frente a las amenazas internacionales», expresó Maduro ante miles de seguidores.
El Mandatario acusó a la oposición de pedir, con sus gestiones en la OEA, una «intervención gringa» en Venezuela. «Han pasado más allá del límite y creen que el pueblo de Venezuela se va a intimidar», subrayó.
«La derecha internacional dio el golpe de Estado en Brasil y la OEA calló. Silencio. Ahora la OEA amenaza con intervenir el país; secretario general de la OEA: vamos a dar la batalla en la OEA y en las calles de América Latina y el Caribe», aseveró.
Maduro arremetió contra Luis Almagro por haber pedido este martes una «sesión urgente» del Consejo Permanente para discutir la situación política e institucional en Venezuela, invocando la Carta Democrática, un mecanismo que se activa en caso de alteración del orden constitucional.
Al referirse al gobierno de Estados Unidos y a Almagro, el presidente dijo sentirse honrado por los ataques del «imperio decadente y de sus títeres».
Maduro anunció que demandará judicialmente a la directiva del Parlamento de mayoría opositora por «usurpación de funciones» y «traición a la patria», luego de que la oposición lograra que la OEA decidiera tratar la crisis venezolana.
«Una demanda con recurso de amparo inmediato porque pretenden ir a pedir la intervención de Venezuela en organismos internacionales, traicionando la patria y sin tener facultades constitucionales para representar a la República», afirmó.
El gobernante dijo querer «un juicio histórico que se transmita a toda la Nación» contra la directiva parlamentaria presidida por el férreo antichavista Henry Ramos Allup, quien pidió «derecho de palabra» ante el Consejo Permanente de la OEA para abordar la situación de Venezuela.
«No sólo la usurpación de funciones sino por la traición a la patria en la que ha incurrido esta Asamblea Nacional. La pelea es peleando, pido el apoyo de todo el pueblo».
Ramos Allup expresó este martes cautelosa satisfacción ante la decisión de Almagro, al señalar que los Estados miembros del organismo suelen actuar con prudencia; pero advirtió que la OEA no puede «hacer la vista gorda» ante la crisis política, económica e institucional que vive el país.
La oposición gestiona ante el Consejo Nacional Electoral (CNE) la activación de un referendo revocatorio del mandato de Maduro, pero asegura que el poder electoral está al servicio del gobierno y está demorando el proceso. (Emol-AFP)