Al menos 50 personas murieron y otras 140 resultaron heridas en una explosión registrada este viernes en una mezquita chiita de la ciudad de Kunduz, al noreste de Afganistán, según fuentes médicas.
Los chiitas representan el 20% de la población de Afganistán. Muchos de ellos son de la etnia hazara, perseguidos en el país durante décadas.
La explosión se produjo durante la oración de mediodía, la más concurrida de los viernes, día de descanso musulmán y los testigos describieron escenas atroces.
“Hasta ahora hemos recibido 35 cadáveres y más de 50 heridos”, dijo a AFP un médico del hospital central de Kunduz, que no quiso que su identidad fuera divulgada.
Poco antes, un responsable local de la ONG Médicos Sin Fronteras (MSF) dijo que su clínica en Kunduz recibió “a más de 90 pacientes heridos y al menos 15 cadáveres”.
“Esta tarde se produjo una explosión en una mezquita de nuestros compatriotas chiitas en el distrito de Khan Abad, en Bandar, la capital de la provincia de Kunduz, que causó varios muertos y heridos”, declaró el portavoz de los talibanes, Zabihullah Muhajid.
El ataque no ha sido reivindicado hasta el momento, pero el grupo yihadista Estado Islámico, rival de los talibanes, ha perpetrado actos similares en las últimas semanas. (La Tercera-AFP)