Fue una cita “amena”. Así calificaron en La Moneda la primera reunión que sostuvo la Mandataria Michelle Bachelet con quien será sucesor -y fue su antecesor- en La Moneda, el presidente electo Sebastián Piñera. Tras el triunfo del representante de Chile Vamos el domingo, el desayuno de ayer en la casa del ex mandatario, en el que participó también la ex primera dama Cecilia Morel y el hoy ministro del Interior, Mario Fernández, buscaba ser un encuentro “republicano”, pero también el primer paso para dibujar lo que será la convivencia de ambos de aquí al 11 de marzo.
En La Moneda valoraron las señales detranquilidad que habría dado Piñera en el encuentro, que duró mas una hora y 40 minutos. En ese sentido, vieron con buenos ojos que, luego de que Bachelet anunciara desde el frontis de la casa de Piñera que enviará el proyecto para una nueva Constitución – “le dije que enviaré el proyecto de una nueva Constitución, es importante respetar ese proceso donde participaron más de 200 mil personas”, dijo-, el propio presidente electo señaló estar “de acuerdo” en que la Carta Magna “podemos y debemos perfeccionarla”.
Sin embargo, y pese a los gestos coordiales de ayer, en el Ejecutivo existe inquietud por lo que será la “actitud” de la derecha en el Congreso sobre la agenda legislativa del gobierno, ahora que Piñera tiene asegurada la banda presidencial.
Tanto Bachelet como el ministro Fernández señalaron en las últimas horas que se trabajará hasta el último día, graficando que La Moneda espera tener los menores contratiempos posibles para sellar proyectos emblemáticos.
En esa línea, la principal inquietud de palacio está en la gratuidad en educación superior, que La Moneda logró aprobar en general en la sala del Senado la semana pasada con votos de Chile Vamos luego de que Piñera diera un giro en la campaña y respaldara ese beneficio (ver secundaria).
Un compromiso que el ministro de la Segpres, Gabriel de la Fuente, llamó a respetar. “Nuestra agenda sigue porque dice relación con el cumplimiento del programa (..) Esa agenda contiene proyectos prioritarios, que son la médula del gobierno, como son educación superior y gratuidad, y de universidades estatales”, dijo el ministro a La Tercera, quien espera que la segunda inciativa pueda despacharse esta semana de la Cámara para pasar al Senado y “en enero podamos tenerlo terminado”.
En gratuidad el mensaje es claro: “Creo que en la buena fe de la candidatura, de los parlamentarios que concurrieron unánimemente a aprobarlo en comisión y en sala y que, por lo tanto, van a ser coherentes con la postura expresada por el ahora presidente electo. Me extrañaría que no fueran coherentes con aquello, porque si así fuera, quiere decir que aquí hubo un abuso de la fe publica con fines electorales o electoralistas, más que un genuino propósito”.
PRUDENCIA
El llamado del ministro coincidió con el emplazamiento hecho en las últimas horas desde Chile Vamos y el piñerismo a La Moneda a mantener “prudencia” con su agenda legislativa en las semanas previas a la asunción de Piñera.
“(La Presidenta debe) tener la prudencia de escuchar que su agenda legislativa, en los temas más urgentes, debiera esperar el próximo gobierno, y el próximo Congreso”, dijo el domingo en la noche el jefe político de la campaña del ex Presidente, Andrés Chadwick.
En esa línea, ayer el presidente de RN, Cristián Monckeberg, señaló a La Tercera que “los apuros legislativos son malos consejeros en la etapa final de un gobierno”, mientras que la máxima líder de la UDI, la senadora Jacqueline Van Rysselberghe, sostuvo que “no resulta razonable que un gobierno -cuyo candidato, llamado continuador del gobierno de Michelle Bachelet- pierda por nueve puntos y luego le ponga discusión inmediata a proyectos que claramente la ciudadanía no respaldó”.
La agenda legislativa de La Moneda se abordó más tarde en un encuentro entre el presidente electo y los presidentes de RN, la UDI y Evópoli, donde el ex mandatario pidió hacer un estudio sobre los proyectos que quedan para lograr una “transición republicana”.
Desde La Moneda, De la Fuente señaló que “no hay que olvidar que parte importante de nuestra agenda se ha materializado con la oposición de Chile Vamos” y que “aquí no hay ningún frenesí ni apuro que nos haya bajado por las elecciones, esto es parte de una planificación legislativa que se va cumpliendo”.
Con todo, agregó que apelarán a “la persuasión, conversar y tercero están las urgencias, pero generalmente tratamos de ocuparlas como último instrumento”.
Entre otros proyectos que seguirá impulsando el Ejecutivo están -además de educación- la Subsecretaría de la Niñez, proyecto de división del Sename, el cambio al sistema de pensiones y Sanna.
Ayer, además, tras un acuerdo gestado desde La Moneda la comisión mixta despachó el informe sobre la elección de gobernadores regionales, que quedó fijada para el 2020. (La Tercera)
