El más veterano de los candidatos demócratas a las elecciones presidenciales estadounidenses de 2020, Bernie Sanders, resultó herido este viernes en su ducha, si bien reanudó su campaña enseguida, informó una de sus portavoces.
Este incidente podría contribuir a alimentar los interrogantes sobre las posibilidades de este hombre de 77 años de imponerse ante una gran cantidad de candidatos más jóvenes que esgrimen, al igual que él, promesas de mayor justicia social y medioambiental.
El senador independiente “se cortó con el borde de la puerta de vidrio de la ducha y, por precaución, fue a un centro de salud donde le dieron siete puntos de sutura”, explicó Arianna Jones, citada por medios estadounidenses.
Tras el incidente, “el senador participó en todos los eventos previstos en su agenda”, añadió.
Sanders participó en una mesa redonda en Carolina del Sur sobre la cobertura sanitaria, donde fue filmado con una gran venda en la frente.
La salud de los candidatos se ha convertido en un gran asunto en el marco de la campaña electoral de Estados Unidos.
En las últimas elecciones presidenciales de 2016, el republicano Donald Trump insistió en que su rival demócrata Hillary Clinton tenía poca “energía” para ser presidenta, y la indisposición de la exsecretaria de Estado durante una ceremonia por los atentados del 11-S contribuyó a alimentar las críticas.
De cara a las elecciones de 2020, la lista de los aspirantes demócratas asciende a una quincena de nombres, de los que la más joven es Tulsi Gabbard, de 37 años.
Sanders, que ya fue candidato en 2016, encabeza por ahora las encuestas que, a estas alturas de la carrera, reflejan sobre todo la notoriedad de los competidores.
Igualmente popular, el exvicepresidente Joe Biden, de 76 años, podría sumarse próximamente.
Si uno de los dos llega a ganar la presidencia, se batiría el récord del presidente más anciano que llega a la Casa Blanca. (La Nación-AFP)