La directora del Instituto Nacional de Derechos Humanos, Consuelo Contreras, comenzó a entregar carpetas de los informes Valech 1 y 2.
Si bien el artículo 15 de la Ley N° 19.992 establece que los documentos, testimonios y antecedentes aportados por las víctimas ante la Comisión Nacional sobre Prisión Política y Tortura son secretos, y que solo se pueden divulgar después de 50 años de entregados los testimonios, Contreras explicó que solo se los está dando a los propios declarantes: a quienes rindieron testimonios que dejaron registrados en esos informes.
Ayer fue la segunda vez que, en un acto en San Antonio, la directora del INDH entregó estas carpetas a ex prisioneros políticos de Tejas Verdes. La primera vez fue en diciembre, cuando las recibieron 70 víctimas. Ayer, en una ceremonia similar a la de entonces, les dio a 81 personas requirentes la copia fiel a la original de las carpetas Valech.
La fecha coincidió con que justamente ayer se publicó en el Diario Oficial la Ley 21.154 que designa al Instituto Nacional de Derechos Humanos como el mecanismo nacional de prevención contra la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes.
«Hasta el momento hemos entregado unas 500 carpetas, de un total de 77 mil», explica Consuelo Contreras. Agrega que «al principio eran personas individuales que llegaban al INDH a solicitarlas. Luego se acercaron organizaciones». Sobre las motivaciones de los solicitantes, señala que algunos quieren sus antecedentes para entregarlos a tribunales, por acciones legales; otros, para compartirlos con su familia, y otros simplemente quieren guardar sus testimonios.
-¿Usted es partidaria de que se conozcan públicamente?
-No, lo que creo es que la justicia debería tener acceso a esos testimonios. (El Mercurio)
