Documentos hasta ahora desconocidos, pueden darle un nuevo giro a la trama que afecta a la familia Frei y que tiene como protagonistas al ex Presidente Eduardo Frei Ruiz-Tagle y a su hermano Francisco.
La crisis en el clan presidencial se hizo pública luego de que se filtrara en el medio Interferencia la autodenuncia que realizó ante la Unidad de Alta Complejidad de la Fiscalía Centro Norte de Santiago, Francisco Frei Ruiz-Tagle.
En el texto que presentó el hermano del ex Mandatario -quien además ha tenido cargos como director de TVN, de Radio Cooperativa y secretario general de la Democracia Cristiana– reconoce que ocupó el poder general de administración que tenía de la empresa Inversiones Saturno S.A., de propiedad del ex Jefe de Estado para subsanar problemas económicos personales y los de su empresa Almacenes de Depósitos Nacionales S.A. (Almadena).
Así fue como, según la autodenuncia, firmó instrumentos crediticios, como letras y pagarés, a nombre de la sociedad de su hermano. “Debo declarar que todo lo que se señala lo hice abusando de la confianza y nombre de mi hermano Eduardo Frei Ruiz-Tagle, sin su consentimiento ni su autorización”.
Pero la crisis se desató antes, el 30 de julio cuando el ex Mandatario decidió destituirlo de Inversiones Saturno y quitarle el poder que tuvo como administrador por más de dos décadas. En el cargo de gerenta general se nombró a Magdalena Frei Larraechea, hija del ex Jefe de Estado. Quienes conocen de cerca el caso, los Frei Larraeche le dijeron a Francisco que se autodenunciara ante el Ministerio Público. Si no lo hacía, ellos irían a la justicia.
Tras hacerse pública esta situación, el actual embajador para el Asia Pacífico emitió un comunicado donde manifestó: “Como familia Frei Larraechea estamos muy golpeados y atravesando por un momento muy difícil en lo humano. Estamos impactados por los hechos objeto de la autodenuncia que Francisco Frei realizó ante el Ministerio Público, en la que reconoce haber violado nuestra confianza”.
Las operaciones realizadas por Francisco Frei incluirían la falsificación de la firma del ex gobernante e incluso el uso de su huella. Se habla de un perjuicio a los Frei Larraechea por unos 500 millones de pesos que podría llegar a más de mil millones.
El Líbero tuvo acceso a nuevos antecedentes que no salieron a la luz en primera filtración.
Se trata de documentos que fueron adjuntados en la segunda autodenuncia que Francisco Frei realizó el martes 27 de agosto ante fiscalía. En concreto son dos informes médicos que dan cuenta de patologías neurológicas y siquiátricas que el hermano menor del ex Presidente se trata desde 2013.
En uno de ellos, su médico siquiatra tratante afirma que es su paciente desde el año 2013. Que presenta un «transtorno depresivo recurrente» y «episodio depresivo severo actual». Se describe que hace tres años consultó por síntomas como «intensa angustia, desánimo, insomnio, anorexia, anhedonia, sensación de nerviosismo constante, alteraciones cognitivas, fallas de concentración, memoria». Agrega el especialista que «el cuadro se inicia en relación a problemas laborales». Se detalla el tratamiento que lleva con antidepresivos y ansiolíticos y que ha presentado recaídas anímicas «asociadas a problemas de tipo laborales y financieros».
En otro de los documentos que ya están en manos de fiscalía se entregan más datos de la salud del ingeniero comercial, en específico de una operación a la cabeza que se le hizo en 2015.
El informe es firmado por un médico neurocirujano. Se lee en el informe que en enero de 2015 fue operado «de hematoma subural derecho, luego de sufrir caída en su baño».
El neurocirujano agrega que los «antecedentes de depresión se exacerbaron post cirugía cerebral», por lo que debió ser tratado con fármacos antidepresivos en altas dosis. Se detalla que tiene una depresión severa y que al igual que antes de la cirugía «interfiere con su rendimiento cognitivo».
El Líbero