Esta mañana el general director de Carabineros, Mario Rozas realizó un punto de prensa donde anunció una serie de medidas para reestructurar la orgánica de la institución sobre la gestión del orden público.
En relación a esto, el uniformado indicó que “he tomado la decisión de instaurar una mesa de trabajo. Y dice relación con la modernización y la optimización de los recursos humanos. Esta va a sufrir una optimización que va a afectar la estructura, el funcionamiento y la incorporación de nuevas tecnologías”.
También se refirió a los casos investigados por uso excesivo de la fuerza por parte de miembros de la institución. Al respecto señaló que “de las 856 investigaciones hay muchas de ellas que están terminadas en la fase administrativa. Y en algunos casos como el del Liceo 7 donde se hizo uso de la escopeta antidisturbio, el caso de un estudiante de medicina, el fallecido en Maipú que hay una vinculación con la institución, otro joven que resultó golpeado en Maipú y fue viralizado en redes sociales, los golpes a varias personas en un cerro de Valparaíso después de los saqueos, el carabinero que habría utilizado a un menor como escudo humano, la utilización de gas pimienta en Melipilla, la agresión que sufrió una persona en la Plaza de Ñuñoa, algunas de las investigaciones que se están realizando, se ha llegado a la certeza administrativa que hay responsabilidad de los carabineros involucrados”, indicó la máxima autoridad de la institución.
Y agregó que “a contar de esta fecha están en la formulación de cargos y se van a aplicar sanciones disciplinarias, que van desde la expulsión de la institución y en otros casos con anotaciones negativas que impactan en la permanencia en la institución y también en el periodo de calificación”.
“En forma paralela indudablemente que esto continúa a través del Ministerio Público donde hemos prestado toda la colaboración para que estos casos se puedan esclarecer”, indicó.
Respecto a las denuncias sobre dos personas en riesgo vital que habrían sido impactadas por bombas lacrimógenas en Plaza Italia, Rozas indicó que “quisiera lamentar ese caso, que es muy grave. Los niños, niñas y adolescentes son muy relevantes para nosotros como institución. Nosotros apenas tomamos conocimiento de ese caso tratamos de recabar la información que estaba disponible en ese momento. Hubo algunas dificultades en la obtención de la información, pero no obstante eso, nosotros pusimos todo a disposición del Ministerio Público”.
Nueva estructura
También se refirió al anuncio de una nueva orgánica en relación al control del orden público. Al respecto afirmó que “he tomado la decisión de instaurar una mesa de trabajo. Y dice relación con la modernización y la optimización de los recursos humanos. Esta va a sufrir una optimización que va a afectar la estructura, el funcionamiento y la incorporación de nuevas tecnologías”.
Detalló que “se va a suprimir la zona Santiago de Control del Orden Público y se van a crear dos prefecturas que van a pasar a denominarse prefecturas de Control del Orden Público, una en la zona oeste y otra en la este. Se va a cambiar de denominación, se suprime la expresión Fuerzas Especiales, y van a ser reparticiones de Control del Orden Público”.
“Y se cambia la dependencia operativa y administrativa, y van a estar a cargo de la respectiva jefatura de zona de los generales jefes de zona para hacer un mando mucho más directo y ejercer un control mucho más efectivo en las operaciones”, indicó.
Nuevas tecnologías y readecuación de los protocolos
Rozas también señaló que se avanzará en la “incorporación de nuevas tecnologías. Siguiendo las experiencias de otros países, vamos a incorporar la inclusión de armas no letales, vehículos más livianos muchos más versátiles. Y principalmente lo que es la incorporación de los medios audiovisuales”.
Además sostuvo que “yo quisiera recalcar que la readecuación de los protocolos de actuación de nuestros procedimientos lo vamos a dejar sobre la base de la sociedad civil. Vamos a aceptar la cooperación para que instituciones como el Instituto Nacional de Derechos Humanos, la Defensoría de la Niñez y todas aquellas instituciones de la sociedad civil que nos puedan ayudar a actualizar nuestras tácticas y técnicas de control de orden público”.
La Tercera
