La propuesta fue hecha en la comisión política del lunes 9 de marzo. Iniciar una campaña para reencantar a los seguidores de la UDI con el partido.La repuesta llegó rápido: «Mejor preocupémonos de la gente que se nos está yendo», dijo uno de los consejeros gremialistas.
El dirigente, aludía a las renuncias de militantes ocurridas en el marco del denominado caso Penta, en el cual se han visto involucrados varios de sus principales dirigentes.
La inquietud tenía fundamento. De acuerdo a cifras del Servicio Electoral, durante enero y febrero, la UDI registró 119 desafiliaciones a la colectividad, convirtiéndose así en el partido con mayor número de bajas en lo que va del año.
Esto sucedió durante estos dos primeros meses del año donde se registraron parte importante de las diligencias de la fiscalía respecto al caso, así como también se conocieron una serie de antecedentes respecto de la carpeta de la investigación.
Toda esta situación llevó incluso a que el diputado Ernesto Silva renunciara a su cargo de presidente del partido en medio de una serie de cuestionamientos por su manejo del caso.
Las 119 dimisiones ponen a la UDI a la cabeza del ranking, siendo secundada por Renovación Nacional, con 112.
La buena noticia para el partido que encabeza interinamente el diputado Javier Macaya es que ellos registraron 52 afiliaciones, en cambio sus socios de calle Antonio Varas, según los datos del Servel, ninguna.
En todo caso, Macaya desestimó que las salidas estén motivadas por el caso Penta y planteó que las cifras están dentro de lo normal. «No ha variado el número de renuncias y afiliaciones de militantes al partido respecto al año pasado. No hay renuncias significativas producto del caso Penta. Este comportamiento es absolutamente normal», dijo el parlamentario.
En el partido también recordaron que, de acuerdo a cifras internas, cuentan con unos 70 mil militantes, por lo que las dimisiones serían más bien marginales y normales.
El secretario general de RN, Mario Desbordes, tuvo un diagnóstico similar. «Me parece normal la cifra. En el segundo semestre (del año pasado) de un periodo sin elecciones internas ingresaron 500 personas al partido, por lo que los 112 renuncias son normales», dijo el dirigente.
Los movimientos de militantes no solo ocurrieron en los partidos de la Alianza.
En la Nueva Mayoría, por ejemplo, se registró uno de los casos más llamativos. Durante enero y febrero, la Democracia Cristiana tuvo 3.514 nuevas incorporaciones y sólo 71 renuncias.
Esto se explicaría a raíz de las elecciones internas que tendrá la DC este próximo 29 de marzo. Situación similar es la del PS, que elegirá a fines de abril a los integrantes del comité central y la directiva que liderará la colectividad por los próximos dos años. Los socialistas registraron un aumento de 288 militantes y 82 renuncias, según publicó La Tercera.
Otra colectividad con fichajes fue el Partido Progresista, de Marco Enríquez-Ominami , donde 31 personas pasaron a engrosar sus filas. En el Partido Radical, en tanto, ficharon 201 nuevos militantes.
En total, en los dos primeros meses del año, 4.089 personas se afiliaron oficialmente a 12 de los partidos vigentes en nuestro pías, y 603, optaron por irse.