La alcaldesa de Santiago, Irací Hassler, afirmó —sin aportar evidencia— que durante el gobierno del Presidente Piñera hubo “un abandono muy profundo del centro”, intentando deslindar su propia responsabilidad en los siguientes problemas que afectan la comuna:
1. Siendo concejala, Hassler avaló las tomas violentas de liceos y se opuso a la Ley Aula Segura, agravando el daño sobre la comunidad educativa y el entorno urbano de los colegios.
2. Hassler y el PC fueron activos promotores de la violencia del estallido que destruyó cientos de inmuebles y espacios públicos en la Alameda, Lastarria, Bellas Artes, San Borja o Concha y Toro. Como alcaldesa, Hassler participó en marchas que terminaron en saqueos y desmanes, como los del 11 de septiembre de 2021.
3. En pandemia, Hassler rechazó las medidas para permitir la apertura gradual del comercio, lo que sumado a la violencia del estallido, derivó en el cierre de cientos de locales. En septiembre de 2021, Hassler ofreció 1.000 puestos para comercio informal, lo que explica, en parte, el desborde de esta actividad ilícita junto con el fracaso del “copamiento” de Meiggs que ella lideró.
4. En 2022, la alcaldesa paralizó un Cesfam que beneficiaría a 30 mil vecinos, para embarcarse en la compra de la clínica Sierra Bella, donde se han detectado graves irregularidades.
En vez de mentir culpando al expresidente Piñera de sus propios errores, la alcaldesa debiera presentar un plan serio para resolverlos, antes que la crisis de Santiago Centro se haga irreversible. (El Mercurio Cartas)
Iván Poduje Capdeville