El ministro de Justicia, Luis Cordero, afirmó que el Gobierno está revisando posibles nexos de autoridades del Ejecutivo con el abogado Luis Hermosila, desde que detonó el denominado caso Audios,
En conversación con Radio Pauta, el Secretario de Estado indicó que «el Gobierno ha hecho sus evaluaciones desde que estalló el caso», relativas a verificar «si hay personas que están en el gabinete que tuvieron o mantuvieron contacto con el abogado Luis Hermosilla». «El Ejecutivo no es ajeno a las contingencias de este tipo», afirmó.
En su caso, el ministro reiteró que la única comunicación con el abogado fue «cuando iba a asumir el patrocinio de Miguel Crispi y tratamos de coordinar una reunión para ver antecedentes». «Yo había participado en algunas evaluaciones de antecedentes«, indicó, acotando que «la conversación nunca se produjo, porque luego estalló el caso Hermosilla. De hecho, por eso el patrocinio de él nunca se llevó a cabo por lo mismo«.
En lo relativo al jefe de asesores de Presidencia, Cordero aclaró que «tuvo contacto con él para efectos de asumir su patrocinio, pero fueron las conversaciones que puede tener cualquier persona con el que pretendería ser su abogado en un momento determinado».
Con todo, el titular de Justicia advirtió que «dadas las características del rol de Luis Hermosilla, no solo por su trayectoria profesional previa, sino que por los roles que cumplió en el pasado, roles públicos y privados, si se van a revelar buena parte de esas informaciones, es probable que revele una gran cantidad de conversaciones con actores del sistema político en su más amplia variedad. Muchas de ellas asociadas a su desempeño profesional, otro probablemente a gestión de terceros».
En esa línea, indicó que «en el momento en el que encontramos obtener ventajas pequeñas, es decir, que a partir de determinada comunicación yo rento en otro, yo creo que sería extremadamente complicado para el sistema político en su globalidad». «La pretensión de buscar ventajas políticas a partir de ese tipo de comunicaciones, más allá de los delitos, más allá de los conflictos de intereses, con indiferencia a quien sea, es un problema complejo para el sistema político en su globalidad«, recalcó. (Emol-Pauta)