La debilidad de la economía, la baja demanda por viviendas, mayores restricciones financieras, alzas de costos y «permisología». Ese cóctel de factores tiene al sector de la construcción prácticamente con nulos inicios de nuevos proyectos en el ámbito residencial.
Así lo reflejan las últimas cifras de permisos de edificación divulgadas por el INE. En julio de 2024 se aprobaron apenas 2.966 viviendas nuevas en el país, una fuerte caída de 76,7% anual y, a la vez, se convirtió en el menor volumen desde que existe registro.
Esto es desde 1991, cuando la población de Chile rondaba los 13,5 millones de personas, mientras que hoy suma cerca de 20 millones de habitantes.
En tanto, la superficie visada para obras nuevas residenciales en el séptimo mes fue de 257.071 metros cuadrados, también el dato más bajo en 33 años.
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