Fue justo ayer, cuando se cumplió un año de la guerra entre Israel y Hamás, que Radio Bío Bío le consultó al canciller Alberto Van Klaveren sobre si la conducta de Tel Aviv en la Franja de Gaza es genocida.
El ministro contestó: “No es un término que yo utilice”. Esto, pese a la clara posición del presidente Gabriel Boric y del Gobierno sobre la materia.
El 24 de septiembre, en su discurso ante la Asamblea General de Naciones Unidas, el mandatario calificó como “masacre y conducta genocida” la del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en Gaza.
Al día siguiente, el 25 de septiembre, en el World Leaders Forum de la Universidad de Columbia, reiteró su crítica a la “conducta genocida” de Israel.
En paralelo, la ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo, en entrevista con radio Usach habló de “actos genocidas y criminales” por parte de Tel Aviv.
Además, el 12 de septiembre Chile presentó ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya su intervención en el caso de Sudáfrica contra Israel, país acusado, precisamente, de cometer genocidio en Gaza.
Con todos estos antecedentes, las declaraciones del canciller no pasaron inadvertidas.
El diputado socialista, Marcos Ilabaca, presidente del Grupo Interparlamentario Chileno Palestino, aseguró que “lo importante es la posición oficial de Chile” y agregó que “cualquier interpretación distinta, lo único que busca es generar una polémica artificial”.
Fue secundado por el director ejecutivo de la Comunidad Palestina en Chile, Diego Khamis, quien señaló que “obviamente, lo que Chile sostiene como estado es que lo que ocurre hoy en Palestina es un genocidio”.
“Además, esta posición tiene un amplio respaldo transversal de parlamentarios de distintos sectores políticos”, añadió.
Para la diputada humanista, Ana María Gazmuri, es un “error grave” la posición de Van Klaveren, ya que “no hay matices” respecto de lo que ocurre en Gaza. Su par independiente de la bancada comunista, Hernán Palma, dijo que es “impresentable” la “contradicción al interior del Ejecutivo”.
“Si el canciller no mencionó la palabra explícita de genocidio, creo que es un error grave. Tener matices al respecto, a la definición o cuándo calificar de genocidio la muerte sistemática de miles de inocentes, yo creo que no se ve bien… sería importante enmendar”, indicó Gazmuri.
Mientras que a Palma le parece “preocupante que haya contradicciones en el Ejecutivo. Yo lamento esta contracción”.
Por su parte, Roberto Ampuero, excanciller del segundo gobierno de Sebastián Piñera, calificó la diferencia entre el Presidente y su canciller como un fenómeno de “pluripolítica exterior” del Gobierno, con posturas del mandatario divergentes con las del Partido Comunista y, ahora, con las de Van Klaveren.
En el marco del aniversario de la guerra en Gaza, el canciller también explicó que mientras no haya un cese al fuego entre Israel y Hamás, el embajador chileno en Tel Aviv, Jorge Carvajal, permanecerá en nuestro país. (Bio Bio)
