El presidente de la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa), Hermann von Mühlenbrock, realizó duras críticas en contra de las indicaciones ingresadas por el Gobierno a la reforma laboral y aseguró que el peso de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) al interior del Ejecutivo ha hecho que el proyecto se mantenga sin variaciones.
En entrevista con El Mercurio, el líder gremial sostuvo que tras conocer los cambios realizados por La Moneda siguen insistiendo en que se trata de una “reforma sindical” y añadió que a juicio del empresariado “este proyecto se hizo con un diagnóstico errado.
En ese sentido, von Mühlenbrock dijo que tras las indicaciones, la reforma “sigue igual. Un tema grave es que es un gran error que no se haya repuesto el concepto de huelga pacífica. Que algunos argumenten que una huelga es un conflicto es una muestra de la virulencia”.
«¿Por qué un conflicto debe ser violento? ¿Qué podemos esperar cuando juegue Colo Colo con la U. de Chile? ¿Qué queda para La Araucanía? Si en definitiva, el propio Estado señala que no se puede plantear como pacífico un conflicto. Son señales terribles», aseguró.
Según el empresario, «lo lamentable es que el concepto de la huelga pacífica venía en el proyecto original, pero el Gobierno no tuvo la fuerza para mantenerlo ni para reponerlo. Este punto, para nosotros es central, y el resto es música».
Además, criticó el tema del reemplazo en huelga y acusó al Gobierno de que «cuando hay huelga de la DGAC reemplazan los militares. Corten la broma. El Gobierno está haciendo una reforma que ni a ellos mismos les gusta; porque apenas ellos pueden, reemplazan».
«Por su parte, la CUT, por un tema de táctica, reclama. A estas alturas, los llanteríos de la CUT son pura estrategia. En la última reunión que tuvimos con la Presidenta Bachelet, lo que más le hicimos ver es que no se podía paralizar una empresa cuando solo el 10% de los trabajadores está en paro», fustigó.
En ese contexto, recordó que en la última cita con la jefa de Estado “nosotros quedamos con la misma sensación: que nuestra argumentación fue comprendida. Pero dicho eso, evidentemente la CUT tiene mucha influencia en el Gobierno, y sus pataletas por las indicaciones es una manera de presionar a la Presidenta» «Yo veo una presión fuerte de la CUT y del PC», concluyó.