El Centro Nacional de Alerta Temprana, de acuerdo a información técnica proporcionada por la Corporación Nacional Forestal (CONAF), a través de su Sistema de Información Digital para Control de Operaciones (SIDCO), informó en su último reporte que a nivel nacional se registran 36 incendios en combate en las regiones de Coquimbo, Valparaíso, Metropolitana, O’Higgins, Maule, Biobío, La Araucanía y Los Lagos, que afectan una superficie de 156.424,69 hectáreas de vegetación.
Asimismo, hay 30 incendios controlados en las regiones de Valparaíso, Maule, Biobío, La Araucanía, Los Ríos y Los Lagos, que afectan una superficie de 1.926,67 hectáreas de vegetación. La información también reporta que un incendio ya fue extinguido en Región del Maule y que afectó una superficie de 2 hectáreas de vegetación.
En cuanto a los recursos desplegados, estos ascienden a un total de 45 aeronaves -entre aviones y helicópteros de Conaf, Onemi y FACh- que se encuentran trabajando en las distintas regiones del país, apoyados por particulares.
A su vez, se mantienen desplegadas cerca de 4 mil personas trabajando en labores de control y extinción de incendios, incluyendo a funcionarios de las Fuerzas Armadas, brigadistas de Conaf, voluntarios de Bomberos, estamentos del Estado, personal municipal, empresas privadas, Gobernaciones e Intendencias.
SUPERTANKER EN CHILE
A las 06:13 horas llegó a la Base Aérea Pudahuel de la Fuerza Aérea de Chile el Boeing 747-400, más conocido como «SuperTanker», el avión cisterna más grande del mundo.
La aeronave, proveniente de Colorado, Estados Unidos, viene a Chile a realizar vuelos de apoyo la labor de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), por los incendios que afectan a la zona centro sur del país.
La nave antiincendios es financiada por Lucy Ana Avilés, psicóloga chilena que vive en Estados Unidos y está casada con el nieto del fundador de la cadena de supermercados Wal-Mart, junto a su fundación Vientos del Sur.
En palabras del director de Conaf, Aaron Cavieres, «el avión operará bajo la modalidad de prueba para ver cómo opera bajo estas condiciones». El avión tiene una capacidad de más de 72.000 litros de agua para combatir las llamas. Esto es 20 veces más la capacidad de las aeronaves cisternas que utiliza Conaf.
El agua puede lanzarse desde una altura de 100 metros a presión o bien reproduciendo las condiciones de lluvia. Su gran capacidad le permite atacar una columna de fuego de 5 kilómetros gracias a su potencia y versatibilidad; junto con su capacidad para operar de noche.
También cuenta con la capacidad de utilizar retardantes, espuma, gel o agua según las condiciones que requiera el incendio.
La aeronave además, es capaz de operar por cuatro horas de manera autónoma por sobre las llamas -con la capacidad completa de agua-, entregando una ayuda a los voluntarios y expertos de Conaf que trabajan en terreno para combatir los incendios.
Cabe destacar que la Fuerza Aérea de Chile apoyará las operaciones de esta aeronave, con dos estanques de agua de 50.000 litros cada uno, con el fin de atacar los incendios. (Emol)
