El Congreso de Brasil alcanzó los votos necesarios para que su Presidente, Michel Temer, no sea destituido y así evitar que responsa a un juicio político por corrupción.
Con 159 votos a favor, una abstención y trece ausencias, la base oficialista impidió que la oposición alcanzara los dos tercios necesarios -342 de 513- para que la Cámara autorizara la suspensión de Temer por 180 días para que sea juzgado según lo solicitado por la Fiscalía.
El Mandatario de 76 años, fue acusado de haber recibido un soborno de 500.000 reales (150.000 dólares) pagados por el gigante de la alimentación JBS a cambio de beneficios para la empresa.
El jefe de Estado afirmó que esa acusación es una «ficción» construida para perjudicarlo y que amenaza la reconstrucción de un país que emerge a duras penas tras la peor recesión de su historia, con más de 13,5 millones de desocupados.(Emol)