Aunque está preso y su candidatura puede ser impugnada, el expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva sigue siendo el favorito, según los sondeos para las próximas elecciones presidenciales que se realizarán el 7 de octubre próximo. Así lo han confirmado dos encuestas recientes que lo sitúan con alrededor del 37 por ciento de intención de voto.
Los sondeos fueron realizados por la firma MDA para la Confederación Nacional de Transporte (CNT, patronal) y el Instituto Brasileño de Opinión Pública y Estadística, a pedido de la Red Globo de Televisión y el diario O Estado de Sao Paulo, que presenta un escenario similar, con Lula al frente.
En segundo lugar, y de acuerdo con una encuesta de Ibope, se encuentran el ultraderechista Jair Bolsonaro con el 18 por ciento, seguido de la ecologista Marina Silva con un 6 por ciento, mientras que el socialdemócrata Geraldo Alckmin y el laborista Ciro Gomes están casi empatados con poco más del 4 por ciento.
La encuesta de Ibope tiene un margen de error de dos puntos porcentuales y recogió las respuestas de 2.002 electores de 142 municipios entre el 17 y 19 de agosto.
RESOLUCIÓN PENDIENTE
Lula está en prisión desde abril pasado, con una condena de doce años por corrupción confirmada por un tribunal de segunda instancia, lo que, según las normas electorales brasileñas, le impediría postular a cualquier cargo público. Aún así, el Partido de los Trabajadores (PT) inscribió la semana pasada su candidatura en el Tribunal Superior Electoral, que ya ha recibido diversos pedidos de impugnación apoyados en esas normas, entre los que figura uno presentado por la Fiscalía General.
Del mismo modo, existen presiones del Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, integrado por expertos independientes y que en una decisión no vinculante anunciada la semana pasada pidió que se tomen «todas las medidas necesarias» para que Lula «pueda ejercer sus derechos políticos» como candidato, aunque esté en prisión. La Justicia electoral tiene plazo para resolver la situación de Lula hasta el 17 de septiembre, cuando faltarán 20 días para las elecciones.
El PT aún no lo ha oficializado, pero si Lula fuera vetado, la candidatura de esa formación sería asumida por Fernando Haddad, compañero de formula del exmandatario, quien no superaría al ultraderechista Jair Bolsonaro. (DW, efe, dpa, O’Globo)