Resulta extraño que el mismo día en que el Presidente constituye el grupo de trabajo por la seguridad, uno de cuyos principales objetivos, según él mismo explicó, será el de modernizar y fortalecer a las policías, aparezcan publicados los planes del nuevo general director de Carabineros para modificar la estructura de esa institución, creando dos nuevas subdirecciones.
¿No sería más lógico que las propuestas de transformación institucional de Carabineros provengan de ese grupo de trabajo? Naturalmente, ello no impide que la propia institución pueda hacer los aportes que estime convenientes, pero canalizándolos por esa vía y sin pretender, como ha sucedido hasta la fecha, que sea ella la encargada de definir su propio funcionamiento. (El Mercurio Cartas)
Juan Enrique Vargas Viancos
Profesor Universidad Diego Portales