Pese a las restricciones asociadas a la norma de emisión y la aplicación de impuestos específicos, que se suman a anuncios y acciones ejecutados por empresas de distintos sectores con el fin de “limpiar” sus consumos, lo cierto es que el petróleo y el carbón siguen dominando la matriz energética nacional e incluso elevando su peso, considerando todos los usos de la energía y no sólo la generación eléctrica.
Así lo evidencia el Reporte Anual del Balance Nacional de Energía, correspondiente al año 2015 que el ministerio del ramo liberó hace unos días y donde se observa que en términos primarios el carbón cerró el ejercicio analizado llevándose el 25% de la torta, mientras que un año antes ocupó el 24%, ubicándose tras el petróleo.
Los consumos primarios corresponden a recursos naturales energéticos que deben pasar por un proceso de transformación antes de su consumo final, considerando en este caso procesos químicos -como la refinación- y mecánicos.
En el balance de 2010, que tiene un menor detalle, el carbón representó el 16 % de la matriz, lo que implica un alza de nueve puntos desde ese año, nivel similar al de hace una década, pues en 2007 este combustible ocupó el 15,8% de la torta total.
ESCALADA DEL CARBÓN
En el reporte de 2015, que por su complejidad se realiza con un año de desfase, la cartera encabezada por Andrés Rebolledo hizo un ejercicio inédito llevando los datos a un nivel de desglose que considera aspectos relativos a los tipos de consumo de energía y también la distribución geográfica de éstos, así como una comparación con países OCDE en términos de intensidad de uso.
El documento plantea, además, que esta información es un aporte para la “toma de decisiones en torno al sector energético nacional” y lo ofrece como una herramienta útil para conocer la realidad del país en términos de los flujos de la energía.
El consumo total de 2015, que comprende carbón, petróleo crudo, biomasa-biogás, gas natural y las energías hídrica, eólica y solar, alcanzó a 305.623 teracalorías, una reducción de 3% respecto del año anterior.
Medido en consumos brutos el petróleo bajó 11% en 2015 respecto del año previo, mientras que el carbón y la biomasa lo hicieron 2% y 1%, respectivamente. Como era de esperar, por la penetración que han alcanzado, las energías eólica y solar presentaron importantes incrementos, de 47% y 158%, en cada caso.
SANTIAGO LIDERA CONSUMO
El transporte, en tanto, se mantiene como líder del consumo energético con un 35% del total lo que implica un alza comparada con el 23% que mostraba en 2010.
Le sigue el industrial con 23% y la minería en tercera posición con el 17% de la torta de consumos, lo que en la comparación con el año anterior, implica alzas en el primer y tercer caso, pues en 2014 ostentaron el 33% y 16%, respectivamente, mientras que en lo que respecta al sector industrial, que representaba el 24%.
Las regiones con mayor consumo energético son Biobío, Valparaíso, Metropolitana y Antofagasta, zonas que son centros productivos y/o de concentración de consumo. En términos de transformación, es decir, donde se procesan recursos para producir otros energéticos, el liderazgo lo exhibe Biobío y le siguen Valparaíso y Antofagasta, mientras que la capital las supera por lejos en uso final, dado que es el principal centro de consumo del país.
Chile fue el cuarto país de la OCDE en términos del consumo per cápita de energía, pero el quinto más energéticamente intensivo en términos del PIB, es decir, se establece que por cada unidad de PIB se usa más del triple de energía que el promedio de los cinco países menos intensivos de este grupo.
STARACE DESTACA DEBUT DE CENTRAL ELÉCTRICA GEOTÉRMICA
Impulsó su desarrollo cuando estaba a la cabeza de Enel Green Power y ahora como titular de Enel, Francesco Starace celebró la inyección inicial de energía a la red de la primera central eléctrica en base a geotermia de Sudamérica, que corresponde a un joint venture entre el brazo de renovables de la italiana y la petrolera estatal ENAP.
«Tomó mucho tiempo y mucha perseverancia y determinación», dijo el ejecutivo, a través de redes sociales, respecto de Cerro Pabellón, la instalación ubicada en la zona de Ollagüe, a 4.500 metros de altura, que con este hito comenzó la fase de pruebas del primero de los dos módulos de 24 MW de capacidad instalada que componen este complejo.
Starace recordó que el potencial geotérmico de la zona norte del país comenzó a ser estudiado en la década de 1930 por ingenieros italianos.
«La tecnología evolucionó y las necesidades energéticas crecieron en la región desde entonces, y ahora en cerro Pabellón se genera energía limpia desplazando el uso de combustibles fósiles», indicó y añadió que Enel agregó una nueva tecnología a su cartera. (DF)