El presidente del Partido Comunista (PC), Lautaro Carmona, abordó la mañana de este lunes la fallida compra de la casa del expresidente Salvador Allende por parte de Estado para convertirla en un museo.
La mirada está puesta principalmente en el rol que desempeñó la ministra de Bienes Nacionales Marcela Sandoval (FA) y el equipo jurídico de esa cartera en la fallida transacción, pero también se apunta a la ministra de Defensa, Maya Fernández, nieta del exmandatario y heredera del inmueble, y a los asesores del Segundo Piso de La Moneda.
La semana pasada, el gobierno ya había recibido una ola de cuestionamientos por la polémica decisión, incluso con voces aisladas del oficialismo, como el diputado Marcos Ilabaca (PS), lo que obligó a reconocer el error. La respuesta del Ejecutivo, sin embargo, en vez de aplacar los ánimos terminó por enardecer aún más a la oposición e incrementó la presión para que se asuman responsabilidades políticas en la fallida compra, cuyo precio había sido fijado en 24.291 UF, unos $ 933 millones a la fecha.
En diálogo con Radio Infinita, en esta jornada Carmona señaló: “Una iniciativa de esa dimensión, que parece muy loable, se afecta, para ser más elegante, por una imprudencia, por una cosa que no debió hacerse, que es adelantar el procedimiento sabiendo que había partes incumbentes que del punto de vista institucional no daba a lugar”.
“Espero que ese, entre comillas, bochorno, no afecte el tema de fondo. Y podamos el día de mañana, cuando esas partes incumbentes inhabilitadas para estar en un intercambio y consumar esta política de Estado, ya no tengan esa condición y pueda el Estado de Chile hacerse de estos patrimonios”, recalcó.
En ese sentido, el timonel comunista destacó que es la oportunidad de tener museos “no vivientes, porque no están las figuras, pero sí tiene mucho de contingencia y de construir en la historia, a partir de que uno pueda hacer un curso de historia recorriendo lugares”.
INSULZA: «TENDRÁ QUE HABER RESPONSABLES»
El gran anuncio del gobierno sobre la adquisición de las casas de los expresidentes Salvador Allende Gossens y Patricio Aylwin Azócar se transformó en un nido de críticas hacia el rol de la ministra de Defensa, Maya Fernández (PS), quien figura como la principal heredera del inmueble, por lo tanto, habría sido una de las beneficiarias de la cuantiosa compra. Sin embargo, la transacción no se completó luego de los cuestionamientos a la probidad del procedimiento, ya que constitucionalmente está prohibido que los miembos del gabinete celebren contratos con el Estado.
Así las cosas, con la marcha atrás del proyecto está en jaque la gestión jurídica que desempeñó el equipo de la cartera de Bienes Nacionales, dirigida por la ministra Marcela Sandoval (FA).
Por lo mismo, el senador socialista José Miguel Insulza apuntó a que “tendrá que haber responsables” de la fallida compra que calificó como “una gran chambonada”
En conversación con Radio Pauta, el legislador sostuvo que “se podría haber hecho de manera perfectamente normal a partir del 12 de marzo, cuando ya la senadora Allende no es senadora y la ministra Fernández no es ministra”.
“Se cometen errores que no es necesario cometer. El gobierno comete errores insistentemente que tienen que ver con un tema de experiencia. Yo soy abogado, le podría haber preguntado, a cualquier abogado”, indicó.
P. VODANOVIC ACUSA DESPROLIJIDAD
La presidenta el Partido Socialista, Paulina Vodanovic, criticó al Gobierno por la fallida compra de la casa del expresidente Salvador Allende, al tiempo que exigió que se asuman responsabilidades y se ofrezcan explicaciones «consistentes».
En conversación con Radio Universo, la dirigenta oficialista indicó que «uno no se explica cómo, habiendo pasado por tantas instancias, nadie advirtió lo que es algo que uno estudia, yo creo, no en el primer año, porque no se estudia constitucional en el primer año, pero en el primer año del derecho constitucional se estudian las inhabilidades de los parlamentarios y de los ministros».
En esa línea, sinceró que «yo lamento mucho el episodio porque la verdad es que finalmente, algo que es una buena idea, que nosotros valoramos como partido, que se compren las casas de los expresidentes y que se pueda conservar la memoria histórica allí, bueno, ha terminado en un tema muy bochornoso».
De ese modo, afirmó que «yo creo que aquí se cometió un grave error jurídico porque finalmente terminamos en lo que estamos y que me imagino que alguien asumirá esas responsabilidades». «Yo creo que cuando uno comete errores, alguien se tiene que hacer responsable de eso, el abogado. Yo no he visto el documento, pero debe tener hasta mosca. Las moscas son las firmas de responsabilidad de la administración pública», agregó.
Ahondando en ese punto, indicó que «hay varias mosquitas. Alguien tendrá, imagino, que hacerse responsable de aquellas», pero acotó que «más que responsabilidades políticas, yo creo que alguien tiene que dar una explicación consistente de cómo no se dio cuenta de aquello y finalmente, la exposición a la que se ha visto la familia Allende, el legado del Presidente Allende, yo creo que es absolutamente injusto y efectivamente no hubo una prolijidad como la que se habría requerido en cualquier acto jurídico, pero más aún de la envergadura y connotación que este tenía». Con todo, aseveró que «la memoria del Presidente Allende se merece una explicación». (La Tercera-Emol)