El reciente asalto tipo encerrona –en el que fue víctima un adulto mayor cerca del Aeropuerto de Santiago– pone nuevamente en evidencia el creciente riesgo para quienes deben movilizarse por la capital y sus alrededores. A este hecho se suma otro caso ocurrido hace un mes en el mismo sector, donde delincuentes armados atacaron, también en la ruta hacia el aeropuerto, a una mujer para robar su vehículo.
Los ejecutivos del sector minero, que frecuentemente se trasladan por rutas estratégicas y zonas de alta exposición, no están exentos de estas y otras amenazas, como por ejemplo el secuestro extorsivo. Recordemos que, de acuerdo a nuestro Departamento de Análisis e Inteligencia Territorial en Insight Security, en 2024 se registraron en Chile, al menos, 30 secuestros extorsivos, pero con un subregistro (hechos que no se denunciaron) de 70%. En este contexto, la autogestión de la seguridad se vuelve una habilidad esencial que busca la prevención y la anticipación de amenazas, y las empresas del rubro deben priorizar la capacitación de sus líderes en este ámbito.
Organismos como la Cámara Minera del Perú han desarrollado programas como el Diplomado Internacional en Herramientas Psicológicas para Líderes en Seguridad Minera (Camiper), enfocados en dotar a los profesionales de estrategias para prevenir y controlar riesgos, lo que nos puede indicar que comenzaron a entender el problema que nuestro país vecino, también, está padeciendo con el auge de esta delincuencia más violenta.
En muchas industrias, la seguridad se concibe como un aspecto externalizable: escoltas, vehículos blindados o monitoreo remoto. Sin embargo, este enfoque reactivo tiene limitaciones evidentes, especialmente cuando los ejecutivos deben moverse con flexibilidad o enfrentarse a amenazas imprevistas. Aquí es donde entra en juego la autogestión de la seguridad, un concepto que implica que cada individuo asuma un rol activo en la prevención, identificación y respuesta ante riesgos.
Más allá de la inversión en guardaespaldas o medidas reactivas, es fundamental que los ejecutivos mineros desarrollen competencias en manejo del riesgo, detección temprana de amenazas y toma de decisiones en situaciones críticas. La seguridad personal no debe depender exclusivamente de terceros, sino que debe ser parte integral de la formación de quienes lideran la industria minera en Chile.
La autogestión de la seguridad no significa actuar de manera temeraria o prescindir de medidas de protección adicionales, no, sino que apunta a desarrollar competencias personales para reducir la exposición al peligro y reaccionar adecuadamente en caso de crisis.
En un contexto donde la delincuencia se ha vuelto más organizada y violenta, confiar exclusivamente en la seguridad reactiva se ha vuelto insuficiente. La seguridad debe integrarse como una competencia ejecutiva clave, al igual que la gestión financiera o el liderazgo estratégico. La autogestión de la seguridad no es sólo una medida de protección personal, sino un factor determinante en la sostenibilidad de la industria minera en Chile.(Red NP)
Gonzalo Cornejo
CEO Insight Security