Aunque hasta fines de febrero tiene duración el actual contrato colectivo firmado entre Codelco y sus trabajadores de Chuquicamata, ya se están dando los primeros pasos para una renovación del acuerdo.
Si bien desde la estatal han reconocido públicamente que este proceso será complejo dado el momento en que se encuentra la empresa y la industria, explorarán la opción de una negociación anticipada.
Al menos así lo comentan desde el mundo sindical de la división del norte. El lunes las bases de estas organizaciones mandataron a sus dirigentes proponer a la administración esta alternativa y ayer se le comunicó a los ejecutivos de la minera este deseo.
El vocero del sindicato N°1 de Chuquicamata, Jaime Graz, comentó que “hoy (ayer) los sindicatos formalizamos la petición y, para ello, nos juntaremos el jueves con la administración para explorar una negociación anticipada lo que, creo, sería conveniente para el mundo sindical, la administración y el país”.
En las votaciones de comienzos de semana también se afianzó la decisión de que los cinco sindicatos de Chuqui sumados al N° 1 de Antofagasta negocien de manera conjunta.
Consultados por esta información, desde Codelco confirmaron la recepción de la petición de negociación anticipada, pero señalaron que comunicarán directamente a los sindicatos su postura.
De todas formas, dice Graz, la compañía habría aceptado de manera preliminar la propuesta. “Creo que lo harán formal (el jueves), porque ya habría una aceptación y un principio de acuerdo para iniciar este proceso con la administración”, sostuvo el vocero.
Eso sí, los plazos son acotados y los sindicatos lo saben bien, por eso, confidencia Graz, se darán alrededor de 15 días para analizar si es factible o no cerrar un acuerdo de manera temprana.
El contrato colectivo actual está vigente hasta el 28 de febrero y, de frustrarse las conversaciones anticipadas, daría inicio al proceso reglado. Es así como se calcula que el 4 de enero los sindicatos presenten un pliego de peticiones, mientras que la negociación en sí comenzaría el 14 de enero.
Graz optó por no detallar las peticiones que harán los trabajadores a la administración, sin embargo, indicó que buscarán mantener los beneficios actuales que poseen los operarios de esta división.
BENEFICIOS POR US$ 500 MILLONES
Los beneficios serán, precisamente, un punto central dentro de la negociación. Según trascendió, uno de los objetivos de la administración de Codelco será rebajar el paquete de apoyos para asemejarlo al de las otras divisiones.
El conjunto de beneficios cuestan a Codelco anualmente alrededor de US$ 500 millones.
Este monto es similar a los ahorros por US$ 547 millones que la corporación informó en 2015 por mejoras en productividad y eficiencia en el marco de su plan de costos.
Conocedores de los distintos convenios laborales de Codelco coinciden en que los beneficios de los trabajadores de Chuquicamata son más y mejores que los de las otras divisiones, algunos porque fueron pactados antes de la nacionalización. En otros casos, se entregaron a modo de compensación por el fin del campamento de la mina y el traslado a Calama o bien en época de altos precios del cobre, cuando lo importante era mantener la producción independiente del costo.
Al revisar el convenio vigente de tres de los cinco sindicatos de la faena figuran prestaciones como salud gratuita para operarios, cónyuges, sus cargas e incluso sus convivientes, lo que considerando medicamentos y otros artículos como lentes y prótesis, representan un costo anual de 24 UF por trabajador, unos $ 630 mil.
Si la especialidad médica no está disponible en el Hospital del Cobre, se financia la interconsulta y se costea a un acompañante, con alojamiento en hoteles de primera categoría, lo que en 2015 demandó US$ 12 millones.
EMPEORAN ÍNDICES FINANCIEROS
La falta de capitalización se ha hecho notar en los números de Codelco. Uno de los indicadores que ha empeorado es el de deuda neta/Ebitda ajustado que pasó de 2,92 veces a septiembre de 2015 a 5,63 veces para igual lapso del actual ejercicio. La directora de Fitch Ratings, Alejandra Fernández, comenta que el aumento de este indicador se debe a la disminución de la caja de la minera. Señala que los estados financieros a septiembre muestran que la caja fue utilizada para pagar inversiones, transferencias por concepto de ley reservada e impuesto por aproximadamente por US$ 4.000 millones por lo que deja a la compañía a esa fecha con una caja de US$ 576 millones.
El director de Plusmining, Juan Carlos Guajardo, comenta que «este ratio ha impactado a muchas mineras pues el nivel de deudas de muchas de ellas se había elevado durante los años del superciclo y cuando disminuye el precio, se deterioran sus ingresos y con ello sus Ebitda». (DF)
