Congresista demócrata pide juicio político a Trump: agitación en mercados

Congresista demócrata pide juicio político a Trump: agitación en mercados

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El representante demócrata por Texas, Al Green, se convirtió en el primer congresista de Estados Unidos en pedir que se someta al presidente Donald Trump al impeachment (juicio político).

Green acusa al mandatario de obstrucción a la justicia en referencia al despido por parte de Trump del director del FBI, James Comey, en medio de sus investigaciones por los presuntos vínculos entre las elecciones presidenciales, la campaña del entonces candidato republicano y Rusia.

“Hoy me levanto para pedir el ‘impeachment’ del presidente de EEUU por obstrucción a la justicia”, testificó Green en la Cámara de Representantes del Congreso.

CLIP: @RepAlGreen: «I rise today…to call for the impeachment of the President of the United States of America for obstruction of justice.»

¿QUÉ ES UN “IMPEACHMENT”, Y PUEDE TRUMP SUFRIR UNO?

En Estados Unidos, el ‘impeachment’ del presidente es el inicio de su destitución por “traición, soborno u otros delitos graves y faltas” y solo tres mandatarios del país del norte se enfrentaron a este procedimiento, Andrew Johnson en 1868 y Bill Clinton en 1998 fueron absueltos, mientras que Richard Nixon dimitió voluntariamente en febrero de 1974, siendo el único presidente en la historia de Estados Unidos en dejar el cargo de forma voluntaria.

Es importante aclarar que cualquier miembro de la Cámara de Representantes puede iniciar el juicio político, pero está propuesta tiene que pasar por un comité legal. Actualmente, esta comisión es dirigida por el republicano Robert William “Bob” Goodlatte, mismo personaje que hace unos años se negó a iniciar un “impeachment” en contra del ex presidente, Barack Obama.

Si el comité decidiera aprobar la iniciativa de Green, la propuesta deberá obtener el beneplácito de la Cámara de Representantes por una mayoría simple de votos. Si esto ocurre, el procedimiento pasará al Senado, donde necesitaría una mayoría de dos tercios. Es importante señalar que actualmente, la mayoría en ambas cámaras del Congreso está en manos de los republicanos.

DERRUMBE DE MERCADOS

Los índices S&P 500 y Dow Jones de Wall Street se encaminaban a su peor día en más de ocho meses tras reportes de un memorando filtrado sobre el exjefe del FBI James Comey que espantaron a los inversores, pues plantean interrogantes sobre si el presidente Donald Trump intentó interferir en una investigación federal.

Trump pidió a Comey que pusiera fin a una investigación del FBI sobre los supuestos lazos con Rusia del exasesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca Michael Flynn, según estos reportes de medios.

La información se conoció después de una tumultuosa semana en la Casa Blanca, en la que Trump cesó de forma inesperada a Comey y después fue acusado de revelar información clasificada al ministro de Relaciones Exteriores de Rusia sobre una operación planeada contra Estado Islámico.

Los últimos acontecimientos ensombrecieron las políticas proempresariales propuestas por Trump, como la rebaja tributaria y la desregulación bancaria, que respaldaron meses de subidas históricas en Wall Street.

“Creo que el asunto más importante ahora es qué significa esto ahora para el plan en el que pensábamos que estaba”, dijo Jeremy Bryan, gerente de cartera de Gradient Investments en Arden Hills, Minnesota. “¿Está aplazado o muerto?”.

Los títulos bancarios, que brillaron durante el auge postelectoral, fueron los más afectados. Durante la mañana, el sector financiero del S&P 500 caía un 2,11%, liderado por las pérdidas de Bank of America y JPMorgan. Goldman Sachs era el que más bajaba en el Dow.

El promedio industrial Dow Jones cedía 1,18% a 20.733,33 unidades; mientras que el índice S&P 500 perdía 1,12% a 2.373,54 unidades; y el Nasdaq restaba 1,74% a 6.060,99 unidades.

El índice dólar se hundía el miércoles, borrando todas las ganancias inspiradas en la posición procrecimiento de Trump tras su victoria electoral de noviembre. El euro tocó su nivel más alto desde el 7 de noviembre, mientras los precios del oro alcanzaban un máximo de un mes.

IMPEACHMENT COBRA IMPULSO

Días después de que la victoria electoral de Donald Trump sorprendió al mundo, Google reportó que se dispararon las búsquedas sobre “cómo impugnar a un presidente”, mientras en redes sociales circulaba la imagen de un helado de sabor “im-peach-mint”.

Lo que en noviembre sonaba a broma está comenzando a parecer una posibilidad real y ayer ganó fuerza, luego de que la Casa Blanca tuviera que salir a responder a un reporte de prensa que acusó al mandatario de discutir información clasificada con el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov.

El propio Trump se defendió en Twitter. “Como presidente, quise compartir con Rusia (en una reunión abiertamente agendada), como tengo todo el derecho a hacer, información relacionada con terrorismo y seguridad aérea”, escribió ayer.

Según el Washington Post, el jefe de Estado discutió con Lavrov hallazgos recientes sobre operaciones de ISIS, cuyos detalles podrían poner en riesgo las operaciones de inteligencia de EEUU. Según una fuente, el mandatario entregó “más información de la que saben nuestros aliados”.

La polémica se sumó al despido del director del FBI, James Comey, quien investigaba los vínculos del equipo republicano con el Kremlin durante la campaña presidencial. Ayer, el New York Times aseguró que el presidente había pedido a Comey abandonar la indagatoria.

La oposición demócrata ya comenzó a pedir un impeachment, en base a la supuesta obstrucción a la justicia y, ahora, la entrega de datos sensibles al Kremlin. No obstante, dada su minoría en ambas cámaras, necesitará apoyo republicano.

Aunque ningún presidente de EEUU ha sido impugnado, no es un escenario imposible. En una nota a clientes, el analista de Height Securities Peter Cohn escribió que hay “dudas entre los inversionistas sobre si los republicanos abandonarán el barco” del presidente.

FILAS OFICIALISTAS

Nadie ha saltado por la borda aún, pero republicanos de alto rango dieron señales de que su apoyo no es incondicional. “Podríamos vivir con un poco menos de drama en la Casa Blanca”, dijo el líder oficialista en el senado, Mitch McConnell a Bloomberg. “Sería útil que el presidente invirtiera más tiempo en lo que intentamos lograr y menos en otras cosas”.

Por su parte, el senador Bob Corker, quien preside el Comité de Relaciones Exteriores, sostuvo que “la Casa Blanca debe hacer algo para ponerse en orden. (…) Va en una espiral descendiente”.

Asimismo, John McCain, excandidato presidencial, calificó la información como “profundamente perturbadora”. El presidente de la cámara baja, Paul Ryan, y el senador Marco Rubio también exigieron explicaciones.

«VIOLACIÓN DE JURAMENTO»

“Esta podría ser la acusación más grave en los escandalosos cuatro meses de la administración de Trump”, señaló ayer un reporte de Lawfare, un sitio web fundado y administrado por exautoridades de inteligencia y seguridad nacional. “Es difícil argumentar que, entregar material altamente sensible a una potencia extranjera enemiga, constituya una ejecución fiel al cargo de la presidencia”.

En respuesta, el asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, H.R. McMaster señaló ayer que Trump no había sido informado de que la información era clasificada y agregó: “Lo que el presidente discutió con el ministro (Lavrov) fue totalmente apropiado”.

CÓMO FUNCIONA LA IMPUGNACIÓN

Comisión de Justicia. Esta instancia de la cámara baja decide si procede una moción de impeachment. Si la aprueba, la misma comisión inicia una investigación sobre los cargos.

Cámara de Representantes. La comisión envía a la sala su reporte. Si ve méritos para la impugnación, debe detallar bajo qué artículos de la Constitución se procesaría al mandatario.

Debate. Los 435 miembros de la cámara votan la moción. Para que ésta avance al senado, requiere una mayoría simple, que los demócratas no tienen.

Senado. Si el proceso llega a la cámara alta, los 100 senadores actúan como jurado y el presidente de la Corte Suprema, como juez. Para impugnar al mandatario, se requiere dos tercios de los votos. En una votación separada, el senado puede prohibir al jefe de Estado postular a nuevos cargos.

Nuevo presidente. Si el jefe de Estado es sacado del cargo, el poder queda en manos del vicepresidente. (La Nación-Pulso-Reuters-DF)

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