El Ministerio de Salud (Minsal) confirmó que cuatro de los 35 alumnos del Internado Nacional Barros Arana (INBA) continúan hospitalizados luego de que el pasado 23 de octubre la manipulación de elementos incendiarios causara una grave explosión al interior de uno de los baños del primer piso del colegio.
Entonces, ocho escolares resultaron con quemaduras de extrema gravedad y otros dos estaban en estado crítico.
Hoy, a casi tres meses de esta tragedia, el Minsal confirmó que cuatro jóvenes siguen hospitalizados, pero ya todos fuera de riesgo vital y dos de ellos podrían recibir el alta domiciliaria pronto, informó El Mercurio.
Tras el alta, varios de los estudiantes continúan con controles en la Corporación de Ayuda al Niño Quemado (Coaniquem). Su directora de Gestión Médica, Pilar Troncoso, confirmó al medio que «en el último recuento teníamos 16 pacientes y, eventualmente, se podrían sumar algunos más en esta etapa de rehabilitación que todavía no han sido dados de alta».
«Hemos estado trabajando colaborativamente con la red pública, para poder apoyar a estos pacientes en su proceso de rehabilitación desde la mirada integral que significa no sólo preocuparse de la cicatriz, sino que también del paciente, de su familia y de su entorno», añadió.
La cirujana pediátrica confirmó además que ya contactaron a las familias de quienes aún siguen hospitalizados para comenzar «una etapa que es muy larga y suele ser bastante compleja de abordar para las familias«.
Coaniquem atiende hasta los 21 años, por lo que Troncoso estima que «muchos de estos pacientes, probablemente, van a estar con nosotros hasta que cumplan esa edad de darlos de alta». (Cooperativa)
