A raíz de la próxima formalización del alcalde de Recoleta, Daniel Jadue (PC), la diputada Maite Orisini (RD) planteó que «toda organización humana es susceptible a tener en sus filas personas que comen hechos de corrupción, lo digo con conocimiento de causa».
La legisladora aludió al escándalo que generó el Caso Democracia Viva en Revolución Democrática, donde el colectivo decidió suspender anticipadamente la militancia de la diputada Catalina Pérez; su ex pareja, Daniel Andrade; y el exseremi de Vivienda de la Región de Antofagasta, Carlos Contreras.
En esa línea, Orsini señaló que «a mi colectividad le tocó enfrentar una situación en el que algunas personas cometieron hechos que son constitutivos de corrupción, y nosotros a actuamos consistentes con nuestros principios».
«Nosotros tomamos medidas preventivas, decidimos, antes de que la justicia determinara la culpabilidad o la inocencia, dar una señal clara a la ciudadanía de que en nuestro proyecto político la corrupción no tiene cabida», agregó.
Por un lado, dijo que «la justicia tiene que actuar con todas sus facultades e investigar. El alcalde Jadue, si efectivamente sostiene su inocencia, tiene que probar que es inocente en juicio«.
Por otro lado, en el ámbito político, «y lo digo humildemente porque a mí no me corresponde pautear ni darle instrucciones al Partido Comunista (…) yo esperaría que tomaran también medidas preventivas para dar la señal correcta a la ciudadanía».
Por lo que «yo esperaría que el Partido Comunista siguiera más o menos la línea que como Frente Amplio hemos seguido cuando nos ha tocado enfrentar casos de corrupción y que puedan también tomar medidas preventivas«.
Al ser consultada sobre qué medidas, la legisladora respondió «medidas preventivas como medida cautelar, una suspensión de su militancia. Alguna señal«. (Emol)
