El ex presidente argentino Eduardo Duhalde (2002-2003) pasa estos días en un hotel en Brasil, cerca de Florianopolis, alejado de la campaña electoral transandina, a sugerencia de su médico, para evitar que su apasionamiento le pase una mala jugada. Este político peronista que fue Vicepresidente (1989-1991) con Carlos Menem, pero de quien luego se enemistó, que fue gobernador de la provincia de Buenos Aires (1991-1999) y que asumió la jefatura de Estado tras la renuncia de Fernando de la Rúa en 2001, fue quien impulsó la candidatura presidencial de Néstor Kirchner en 2003. Sin embargo, poco después se enfrentó a los K y se convirtió en uno de sus más ácidos opositores, al punto que compitió contra Cristina Fernández en las elecciones de 2011, aunque logró un magro resultado.
Por lo mismo sorprendió cuando reconoció que votaría, desde Brasil, por el oficialista Daniel Scioli en la segunda vuelta de mañana. “El ha sido un pacificador. Cuando le pegan en una mejilla, pone la otra. Como gobernador de la provincia de Buenos Aires se llevó bien con todos. Creo que es la persona que necesita el país”, reconoce en conversación con La Tercera.
Y al ser consultado por el hecho de que de todas formas Scioli es el candidato del kirchnerismo, Duhalde replica: “No, no, él es un peronista, es muy distinto, es la contrafigura. Ni Cristina lo quiere a él y ni él tampoco la quiere a ella”.
Duhalde critica a los Kirchner por el clima político imperante en el país, algo que no hizo más que empeorar tras la muerte de Néstor Kirchner, en 2010. “Pero si Cristina no ha hecho nunca una reunión de gabinete. Eso no es un gobierno normal”, se queja.
El ex gobernante sostiene que él mismo ha cuestionado públicamente a Scioli (“y él me lo agradece”) por mantenerse junto al kirchnerismo pese a las diferencias, aunque reconoce que hubo un momento en que el apoyo popular al gobierno era contundente, al punto que Cristina K logró ser reelegida con el 54%.
Otra de las sorpresas que dio Duhalde estos días fue que, así como él vota por Scioli, su esposa, la ex diputada y ex senadora, Hilda “Chiche” González, hará lo suyo pero por el opositor Mauricio Macri. Y él defiende su decisión: “Yo soy amigo de Macri, y él ha hecho una buena gestión en la capital”. Consultado sobre si Argentina está preparada para tener un Presidente no peronista, dice que “sí, como no, ya desapareció el peligro de los militares” y que el país ya está en una nueva etapa.
Al preguntarle si considera que la historia ha sido injusta con él, por haber asumido y conducido el país durante una de las peores crisis políticas, económicas y sociales que ha vivido Argentina, Duhalde es tajante: “La historia aún no se ha escrito. Se escribe muchos años después. Mire a Menem, que se pensó que iba a estar en la historia de manera contundente, y ya lo ve ahora. La historia aún no se escribió”.