A aproximadamente tres años de la última elección presidencial, celebrada a finales de 2021, la derecha chilena llega a diciembre de 2024 con un escenario político marcado por tensiones internas y por la instauración del voto obligatorio en las elecciones generales. En este contexto, las primarias presidenciales de 2025 prometen ser uno de los eventos más determinantes del próximo año, aunque todavía no está claro si efectivamente se realizarán ni quiénes competirán en ellas.
Los antecedentes de comicios pasados muestran que la coalición con mayor capacidad de movilización en primarias suele encaminarse a la victoria presidencial. Según los datos de Panel Ciudadano-UDD, la primaria de Chile Vamos concitaría una participación mucho mayor que la de sectores de izquierda.
En el foco aparecen figuras consolidadas como Evelyn Matthei, y liderazgos disruptivos como Johannes Kaiser, quien fuera militante del Partido Republicano, que introducen nuevas dinámicas en el bloque. Además, la obligatoriedad del sufragio en elecciones generales podría atraer segmentos históricamente menos participativos aún en elecciones voluntarias, configurando así un escenario donde el desenlace de las primarias definirá mucho más que los simples nombres en la papeleta.
1. Johannes Kaiser y el impulso republicano
Johannes Kaiser se ha convertido en un referente para un electorado que desconfía de la política tradicional. Nuestros estudios longitudinales con Panel Ciudadano-UDD vislumbran que buena parte de los votantes potenciales de Kaiser proviene de sectores “antipolíticos” del Kastismo, además de exsimpatizantes de Franco Parisi y el PDG, junto a personas que históricamente respondían “Ninguno” en encuestas pasadas.
- Este perfil contrasta con el típico votante de primarias voluntarias, que históricamente se ha concentrado en comunas con mayores niveles de educación e ingresos. Sin embargo, con el voto obligatorio en elecciones generales, se abre la posibilidad de que muchos electores antes inactivos —y con simpatías anti-establishment— se vean incentivados a participar, incluso en procesos primarios y voluntarios
- Por otro lado, hay señales de votación estratégica: algunos votantes que preferirían a José Antonio Kast en un enfrentamiento directo con Kaiser, estarían dispuestos a participar en una hipotética primaria de Chile Vamos (suponiendo que Kast no compite) para potenciar a Kaiser en desmedro de Evelyn Matthei, considerada la rival más fuerte de Kast en un escenario general.
- De hecho, al menos un 35% de la votación proyectada para Kaiser proviene de panelistas que, si tuvieran que elegir entre Kast y Kaiser, se inclinarían por Kast. Esto sugiere que parte del apoyo actual a Kaiser en encuestas de primarias podría ser un “voto prestado” diseñado para debilitar a la ex alcaldesa de Providencia, beneficiando indirectamente al líder republicano.
2. Relevancia de las primarias: quien moviliza más gente gana
La experiencia reciente demuestra que la coalición que logra mayor participación en primarias tiene altas probabilidades de ganar la elección presidencial. En 2013, la Nueva Mayoría movilizó casi tres veces más votantes que la derecha, facilitando el triunfo de Michelle Bachelet. En 2017, Chile Vamos superó con creces a una izquierda dividida —donde solo el Frente Amplio realizó primarias—, y Sebastián Piñera resultó elegido. Finalmente, en 2021, con un equilibrio mayor pero con un leve predominio de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric se impuso a fines de ese año.
En 2025, la magnitud de la participación dependerá de los candidatos. Evelyn Matthei, figura con amplio reconocimiento en Chile Vamos, aparece en las encuestas con un respaldo elevado que podría atraer una alta afluencia de votantes a la primaria. Los últimos resultados de Panel Ciudadano-UDD señalan que 7 de cada 10 encuestados que planean votar en la primaria de la derecha apoyarían a Matthei, superando incluso la eventual suma de los candidatos de la izquierda en sus internas respectivas.
3. Primarias 2025: Más interés, más votantes, ¿Nuevas reglas?
Las primarias presidenciales de 2025 presentan un escenario donde convergen patrones históricos y factores novedosos. En diciembre de 2020, solo un 21% de nuestros panelistas del Panel Ciudadano-UDD declaraba que participaría en alguna primaria, ya fuera de izquierda o de derecha. Actualmente, cerca de un 51% manifiesta interés en votar en unas futuras primarias, cifra que podría sufrir sobredeclaración, pero que de cualquier forma indica un alza sustantiva.
- La instauración del voto obligatorio en elecciones generales, a partir de 2022, ha ampliado la base electoral y podría generar un efecto de arrastre hacia las primarias, convocando a segmentos tradicionalmente menos activos. Adicionalmente, grupos que antes no participaban —personas mayores, con menores ingresos o educación— hoy muestran mayor inclinación a involucrarse, lo que altera la composición habitual de los votantes de primarias y abre incógnitas sobre los resultados para figuras como Matthei y Kaiser.
- La interacción entre un liderazgo consolidado y uno disruptivo, sumada al posible voto estratégico de seguidores de Kast, pone a prueba a la derecha tradicional.
- Las primarias presidenciales de Chile Vamos se perfilan como un proceso complejo, marcado por la aparición de liderazgos disruptivos como el de Kaiser y la alta popularidad de Evelyn Matthei. La obligatoriedad del voto en las elecciones generales añade incertidumbre respecto de cuánta gente participará y cómo se distribuirá ese electorado en una primaria de la derecha.
- En este escenario, la decisión de celebrar o no primarias cobra relevancia estratégica para Chile Vamos: por un lado, la movilización masiva es clave para las aspiraciones presidenciales; por otro, se corre el riesgo de que ciertos sectores —por razones tácticas— busquen debilitar al candidato más competitivo. Nos encontramos, entonces, ante una contienda que no solo elegirá un nombre en la papeleta. (Ex Ante)
Juan Pablo Lavín