Tiene un personal training, algo que en el mundo PS-PPD no ha pasado inadvertido, porque comentan transversalmente que está “mucho más delgado”, que “está haciendo mucho ejercicio”, que “se le ve renovado”, “muy activo”. Así marcan el punto, no menor, de que el ex Presidente Ricardo Lagos Escobar está bastante lejos de retirarse a los cuarteles de invierno, en momentos en que en que sectores del oficialismo e incluso en la centroderecha miran con buenos ojos la idea de su posible regreso a La Moneda en marzo del 2018.
Si bien el ex Mandatario mantiene a firme la negativa de hablar sobre el tema, sí está evaluando una carta que lo instalaría con un fuerte liderazgo en tiempos de crisis política generalizada: crear una mesa que establezca la verdad oficial de lo ocurrido con las irregularidades en el financiamiento de las campañas.
Desde la Fundación Democracia y Desarrollo, refugio político y comando de operaciones del ex Presidente hace años, sentencian que “no hay nada que comentar” sobre los planes a futuro de Lagos Escobar, que son “elucubraciones” y recalcan que sus intereses apuntan a los temas relacionados con la infraestructura del país, el debate internacional sobre drogas y las nuevas tecnologías como plataformas políticas, donde entran su proyecto al sitio web El Quinto Poder, además de “Tu Constitución”, en el que recoge diversas opiniones sobre lo que debe ser una nueva Carta Magna.
Pero lo cierto es que el ex Presidente se mantiene vigente como un referente político, razón por la cual –explican quienes lo conocen y son sus cercanos– tiene permanentes reuniones y conversaciones con diferentes actores políticos, que van desde ex colaboradores como Sergio Bitar, Edmundo Pérez Yoma, Gutenberg Martínez, hasta el actual ministro del Interior Jorge Burgos, la alcaldesa PPD Carolina Tohá y el timonel DC Jorge Pizarro. También se ha reunido con la presidenta del PS, Isabel Allende, y con el diputado socialista Osvaldo Andrade.
A distintas personas y en diferentes círculos el ex Mandatario ha comentado o al menos esbozado su última idea: crear una comisión por la verdad en materia de corrupción, un equipo que establezca la verdad oficial de las irregularidades en el financiamiento de la política, algo al estilo de lo que fueron en su momento el Informe Rettig, la Mesa de Diálogo y la Comisión Valech en materia de Derechos Humanos.
Quienes lo conocen y conversan habitualmente con el ex Presidente precisan que está “muy activo”, muy interesado en la coyuntura, pero sobre todo “muy preocupado” por el escenario nacional. Que su diagnóstico es severo y que apunta a un vacío de poder que quedó de manifiesto tras los casos Penta, Caval y SQM.Ese sería su próximo paso, una idea que está siendo sondeada, evaluada y que, de concretarse, lo instalaría por “sobre el bien y el mal” –explican– de la vilipendiada clase política. Esto se sumaría a otros guiños con los que el ex Presidente ha marcado pauta y presencia política este año, como su estratégico giro de allanarse a una nueva Constitución, su reconocimiento público –el 4 de mayo en el programa de Don Francisco “Qué le pasa a Chile”– de que se equivocó con el diseño del Transantiago, su flanco más débil, y hace solo unos días, cuando precisó que era partidario de volver al voto obligatorio, al afirmar que “el que no quiera votar que vote en blanco”.
No es de extrañar esa apreciación si se considera algo que es sabido y asumido por todo el mundo. Lagos Escobar tiene un estilo, un sello diametralmente distinto al de la Presidenta Michelle Bachelet, es de la política vertical y con fuertes rasgos paternalistas, casi autoritarios, muy portaliano. También es conocida la “incomodidad” que le generaron los aires refundacionales de la Nueva Mayoría en la campaña y los primeros meses de la administración bacheletista, ya que ello implicaba renegar de la obra de la Concertación de la cual es parte y defensor.
Es ese mismo estilo político que, en el cuadro de tensiones y reveses que han generado los casos Penta, Caval y SQM, ha hecho que en los últimos meses el tema de un eventual regreso de Lagos Escobar a La Moneda no esté ajeno del debate. El domingo en ‘Tolerancia Cero’ el siquiatra León Cohen dijo que “nosotros como sociedad, aún hoy no tenemos líderes políticos que puedan conducir la República en los próximos años y en los últimos años probablemente vamos a tener que recurrir a Ricardo Lagos Escobar, que como todo el mundo dice probablemente va a ser el próximo Presidente de la República con 80 años, porque no hay otra alternativa».
“Si tenemos que recurrir a un viejo crack, ya está claro que no será José Miguel Insulza, sino que Ricardo Lagos Escobar”, sentenció un parlamentario laguista.
Una autoridad del actual Gobierno cercana al mundo del ex Mandatario reconoce en privado que “he visto en muchos sectores de todos los colores que ven la idea de su regreso con mucha simpatía, preguntan por él” y agrega que, si bien es muy temprano aún en tiempos políticos para el tema presidencial, “es evidente que es una de las principales cartas que ya está en el tapete”.
En el PPD precisan –desde la mesa directiva– que el ex Presidente “recobró fuerzas” y que desde hace un tiempo su opinión “nuevamente es importante para el partido, porque es una figura a la que se ve con posibilidades”.
Una cosa es cómo lo vean en la Nueva Mayoría, donde coinciden en precisar que el ex Presidente “está con muchas ganas” y “energía”, recalcando el punto del segundo aire que vive, y otra diferente es en qué está realmente Lagos Escobar. Durante el Gobierno de Sebastián Piñera y hace cuatro meses dijo en privado a sus círculos más allegados que no estaba dispuesto a buscar un regreso a La Moneda, pero las versiones coinciden en que eso hoy en parte cambió, porque el ex Mandatario notó que se abrió un espacio en distintos sectores con la caída en desgracia de Andrés Velasco y de Marco Enríquez-Ominami por los casos Penta y SQM, ya que el primero deja un vacío en la frontera de la centro derecha y el otro en el mundo progresista.
Por lo mismo, entre los cercanos al ex Mandatario explican que hoy se encuentra en etapa de observación, “esperando y viendo”, que a más de uno comentó que “iba a salir a vitrinear” y que su actitud se puede resumir en que “está tirando el anzuelo para ver qué pesca”.
Eso sí, todos coinciden en un punto no menor y es que Lagos Escobar, al igual que el año 2009, no está dispuesto a ir a una primaria presidencial. “Solo será candidato si es una carta de consenso, si es la única carta de la Nueva Mayoría para no perder el poder”, sentenció un laguista muy cercano al ex Presidente.
Reconocen moros y cristianos, cercanos, ex colaboradores, en el PS y en el PPD, que el tema de negarse a la primaria pasa por el conocido “ego” del ex Mandatario, en el entendido que está en un nivel distinto a otras figuras políticas interesadas en competir en las presidenciales del 2017. “Para él es simple, ya fue a una primaria, le ganó a Andrés Zaldívar por un amplio margen, ya fue Presidente de la República, sencillamente no se ve en un debate de primarias con otros cinco candidatos”, acotaron desde el círculo duro del laguismo.
MARCA REGISTRADA
El viernes 26 de junio en la tarde no fueron pocos a los que llamó la atención la imagen de Lagos Escobar en el centro cultural Espacio Matta, sentado al lado de la Presidenta Bachelet, la timonel del PS y el senador socialista Carlos Montes para ver el documental Allende, mi abuelo Allende, en el marco de la conmemoración de los 25 años de la Fundación Salvador Allende y los 107 del natalicio del extinto Mandatario.
El ex Presidente Lagos inició hace un tiempo un proceso de “reconciliación” con el PS, relación que quedó mutuamente resentida desde el término de su Gobierno, al punto que muchos en la colectividad decían entonces que Bachelet era la primera Mandataria de verdadera cepa socialista desde Salvador Allende, ya que Lagos tenía doble militancia con el PPD, el partido que él fundó.–
En ese contexto, varios en el PS vieron la asistencia de Lagos Escobar ese 26 de junio como un gesto a Isabel Allende, pero también al partido en general, como una forma de marcar que ese día estaban él y Bachelet, los dos mandatarios socialistas, homenajeando a la figura del líder de la UP.
Es de matemática básica descartar un escenario en que se lleguen a enfrentar Lagos Escobar e Isabel Allende en una contienda presidencial, porque –coinciden y recalcan en los entornos de ambos– ninguno se va a cruzar en el camino del otro.
También está el factor primarias. En el núcleo de Allende afirman que la senadora, aunque no habla del tema públicamente porque considera que no es el momento y no corresponde, tiene claro el camino que debe seguir y que a todo evento incluye competir en unas primarias de la coalición. “La política ya se acostumbró a primarias para zanjar candidatos y así será”, agregó un dirigente PS.
No todos en la Nueva Mayoría comulgan con la idea de un regreso de Lagos Escobar, le reconocen su liderazgo, su prestigio, su capacidad para marcar rumbos, pero a esas alturas no lo ven en el ejercicio del poder, por más energizado que se encuentre.
