En la Asociación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF) se sienten “vientos de cambio”, así lo aseguran las siete listas que disputan las elecciones en la organización, en las que por primera vez en 20 años no se encontrará el nombre de Raúl de la Puente, histórico dirigente del sector y militante del Partido Socialista, que ha encabezado a la entidad por cuatro lustros.
En un año marcado por escándalos como el caso de las pensiones abultadas de los administrativos de Gendarmería, y álgidas movilizaciones por el reajuste para el sector público y la jornada de protesta por “No+AFP”, parece haber un nuevo clima al interior de la asociación, marcado por las críticas a las históricas dirigencias que, al igual que en otras organizaciones clave, como la CUT y el Colegio de Profesores, han estado durante años dirigidas por partidos que conforman actualmente la Nueva Mayoría.
Es en este contexto que tres listas encabezan la disputa por la presidencia de la ANEF.
Una de ellas es la lista de la continuidad, dirigida por José Pérez (PS), presidente de la Asociación Nacional de Funcionarios de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) y mano derecha de Raúl de la Puente.
A pesar de que la lista oficialista parece tener la delantera, sufrió un duro revés, al surgir “ANEF en Acción”, una apuesta que tiene como principal bandera la independencia y que es conformada por socialistas díscolos, que se descolgaron de la apuesta oficialista, junto a independientes y miembros del Movimiento Autonomista, al que pertenece el diputado Gabriel Boric.
Una tercera lista que se posiciona con fuerza y que ha ganado terreno en el último año es “Cabreados”, cuyos miembros se definen como más a la izquierda que las listas ya nombradas y tienen un discurso más disruptivo, que intenta marcar una fuerte crítica al rol de las dirigencias históricas y su trato con la Nueva Mayoría.
Un ingrediente adicional a esta histórica elección en la ANEF es la introducción del voto electrónico como única forma de sufragio. La iniciativa nació a partir de las críticas a posibles irregularidades en el proceso de votación, como ha ocurrido en la CUT, pero trae consigo la incertidumbre respecto a cuántos de los más de 80 mil votantes ejercerán su derecho a sufragio.
Cabreados de la vieja dirigencia de la ANEF
La agrupación “Cabreados” nace hace dos años, articulando a funcionarios de base y dirigentes de distintas asociaciones del servicio público. Se caracteriza por ser integrada por trabajadores jóvenes, de entre 30 y 40 años, que no militan en “partidos tradicionales”, recalcan desde la organización.
Al igual como ha ocurrido en otras organizaciones sindicales y sociales, la articulación de sus miembros nace a partir de una crítica a las dirigencias históricas de la ANEF, “que llevan más de 20 años en la dirección”, incluida la figura del presidente del Directorio Nacional, Raúl de la Puente, militante del Partido Socialista, que no se postula a la reelección.
Sus principales dirigentes son la funcionaria del INDH, Jimena Aguirre, actual directora nacional de la ANEF, al igual que Orietta Fuenzalida, de la Dirección del Trabajo.
Jimena Aguirre explica que la articulación de este sector de los trabajadores del sector público se ha desarrollado sobre la base de “distintas luchas, como el rechazo de la Reforma Laboral, desde diciembre de 2014; además de la coordinación con el sindicalismo del sector privado, también nos relacionamos con los estudiantes de liceos técnicos”.
“Hoy contamos con un Estado totalmente mercantilizado, marcado por el principio de la competencia, que no responde a las necesidades sociales de nuestro país y de los DD.HH. (…) en este marco, la dirigencia actual de la ANEF, la anterior mesa del Colegio de Profesores y la CUT han estado al debe, por ejemplo, con demandas como el No+AFP”, agrega la funcionaria del INDH.
De acuerdo a Aguirre, la lista Cabreados es como “la disidencia” de la ANEF, de manera similar a como se calificó al movimiento que protagonizó las movilizaciones del Colegio de Profesores en 2014, que tras las últimas elecciones en el Magisterio logró la presidencia de la mesa directiva con Mario Aguilar.
A pesar de que los discursos de las siete listas a la ANEF “son muy similares”, según la dirigenta del INDH “la diferencia es la forma de hacer sindicalismo. Como Cabreados quisimos levantar una mesa alternativa del sector público con trabajadores subcontratados y trabajadores a honorarios, que no tienen ni un reconocimiento de parte de su empleador, que es el mismo Estado”.
Explica que proponen crear un “encuentro nacional del sector público” y transparentar activamente el “presupuesto de $500 millones, que hoy son una cajita negra, ningún socio de la ANEF sabe qué se hizo con la plata. Debemos construir una organización de base, autónoma y sin militancias”, puntualiza.
“ANEF en Acción”
Independientes, autonomistas y socialistas díscolos dan origen a la lista C, “ANEF en Acción”, marcada por definir el quiebre al interior del PS para afrontar la carrera por la dirigencia de los trabajadores del sector público.
Más “centrados” que la lista Cabreados, también aseguran que la dirigencia actual tiene un desgaste y que es necesario impulsar cambios al interior de la ANEF, principalmente resguardando la independencia de los partidos, pero rescatando “lo bueno que ha realizado la anterior dirigencia”.
Claudia Hasbún es una de sus candidatas. Es dirigenta de la Asociación de Trabajadores de Servicio Civil, tesorera del Frente de Trabajadores de Hacienda y milita en el Movimiento Autonomista, junto al diputado Gabriel Boric y el alcalde de Valparaíso Jorge Sharp. La candidata asegura que la postura de su lista busca “valorar lo bueno que ha realizado la ANEF”, como el crecimiento de los asociados, «de 15 mil a 78 mil trabajadores en 20 años”, pero también tiene como objetivo introducir cambios en la organización.
“El retiro de Raúl de la Puente abre espacio para introducir algunos cambios para llegar a sectores de la administración pública que no se sienten representados”, sostiene Hasbún. Por otra parte, la dirigenta asegura que la lista C representa a un sector que “está muy cansado del poder del duopolio y quiere tener una fuerza de izquierda mayor, en donde el único norte sean nuestros funcionarios y funcionarios, que la ANEF vuelva a ser un actor social, para tener un rol más fuerte. Nosotros valoramos por sobre cualquier cosa la unidad de los trabajadores, y nunca la división”.
“En las bases de los trabajadores ha habido un despertar, también desde la ciudadanía, que tiene que ver con la rabia. Partió con el tema de las pensiones y el caso de Gendarnería, allí las bases fueron bastantes rebeldes, la gente se bajaba a la calle, se vieron situaciones de mucha más fuerza que los años anteriores”, señala Jimena Aguirre, de la lista “Cabreados”. Por otra parte, la movilización por el reajuste del sector público también habría traído consigo una reacción desde las bases de la ANEF en contra de las dirigencias. Según explica Aguirre, se entregó inicialmente un pliego de “17 páginas con demandas y, a pesar de la presión en las calles, ni siquiera logramos un reajuste real. En el proceso de negociación del sector público, jamás en ningún momento se les preguntó a las bases si estaban de acuerdo con la negociación con el Gobierno”.
Quien encabeza la lista es el socialista Juan Apablaza, que preside la Asociación de Fiscalizadores del SII, desde 2010. Una carta fuerte del PS, que causó uno que otro roce al bajarse de la lista oficialista del partido.
Apablaza recalca que la mayoría de los que apoyan a “ANEF en Acción” son independientes. “Nuestra propuesta tiene que ver con que hay el fin de un ciclo, marcado con la no renovación de Raúl de la Puente”. Agrega que tiene “una muy buena mirada de lo que hizo Raúl; sin embargo, con la salida de él hay el término de un ciclo”. Critica, asimismo, el hecho de que “antes las decisiones se tomaban entre cuatro paredes”, por lo que, como bloque, buscan fortalecer el trabajo de base y con las regiones.
Sus principales apuestas apuntan a “profundizar la mirada de género, la modificación de estatutos a los tiempos actuales, los temas país como el No+AFP, yo creo que eso es lo que define a nuestra lista, y también la autonomía”.
¿Radicalización de la ANEF?
Los distintos candidatos “alternativos” a la directiva de la ANEF concuerdan en que el año 2016 ha sido particularmente “movido” para los trabajadores del sector público. Por un lado, se abrió un flanco de fuertes críticas por el caso de las “pensiones abultadas” en Gendarmería y, por otro, se vivió una prolongada movilización que mantuvo a miles de trabajadores paralizados por la negociación del reajuste salarial para el sector público, incluido en la Glosa Presupuestaria.
“En las bases de los trabajadores ha habido un despertar, también desde la ciudadanía, que tiene que ver con la rabia. Partió con el tema de las pensiones y el caso de Gendarnería, allí las bases fueron bastantes rebeldes, la gente se bajaba a la calle, se vieron situaciones de mucha más fuerza que los años anteriores”, señala Jimena Aguirre, de la lista “Cabreados”.
Por otra parte, la movilización por el reajuste del sector público también habría traído consigo una reacción desde las bases de la ANEF en contra de las dirigencias. Según explica Aguirre, se entregó inicialmente un pliego de “17 páginas con demandas y, a pesar de la presión en las calles, ni siquiera logramos un reajuste real. En el proceso de negociación de sector público, jamás en ningún momento se les preguntó a las bases si estaban de acuerdo con la negociación con el Gobierno”.
La dirigenta agrega que “la ANEF necesita independencia total, somos testigos de cómo hay colusión entre las dirigencias y el Gobierno. Nos llamaban a no radicalizar la movilización y él último día la gente echó a patadas a los dirigentes”. Aguirre recuerda la escena en que más de una centena de trabajadores del sector público llegaron hasta la Plaza de la Ciudadanía y cercaron los alrededores del Palacio de La Moneda, protestando en contra del acuerdo de un 3,2% de reajuste al que llegó el Ejecutivo con los parlamentarios de la Nueva Mayoría. En dicha ocasión algunos funcionarios realizaron una “funa” en contra de la Presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa (PC), y del representante de la ANEF, Raúl de la Puente (PS).
La candidata de Izquierda Autónoma, Claudia Hasbún, asegura que “no es una crítica contra todos los dirigentes, sino contra aquellos que han perdido el norte de los trabajadores y han cedido en favor del Gobierno, que hoy en día no es un Gobierno que representa a los grupos de izquierda, sino que representa a un sector de centroderecha”.
A juicio de Hasbún, existe un “descontento con todas las fuerzas políticas que no están dando respuesta a las demandas de los trabajadores”. Juan Apablaza agrega que en el proceso de negociación por el reajuste “nosotros como dirigentes de base de la ANEF fuimos muy críticos con los diputados y el Gobierno”, pero hace hincapié en que como lista “no demonizamos los partidos políticos, pero para ser dirigente sindical hay que tener autonomía”.
Un panorama mucho más movilizado y con bases fortalecidas es el que tendrá que afrontar la próxima dirigencia que gane las elecciones de la ANEF, que se desarrollan desde ayer lunes 5 de diciembre, hasta el miércoles 7, elecciones que están marcadas por ser las primeras que se realizan de forma 100% online.
El Mostrador/Agencias