Lo ocurrido con el exmilitar venezolano secuestrado el miércoles en Chile trae a colación lo ocurrido en 2021 con otro uniformado desertor que fue raptado en Colombia, presuntamente, por la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM).
El exteniente del Ejército venezolano, Ronald Ojeda Moreno, fue raptado la jornada de ayer por desconocidos desde el departamento en que vive en Chile. Pese a que no hay información oficial sobre su paradero, cercanos sospechan del régimen de Nicolás Maduro de estar detrás.
Esta situación recuerda lo ocurrido en 2021 con otro joven militar venezolano del Ejército, quien tras desertar en enero de 2019 por estar en desacuerdo con las políticas represivas del Estado venezolano, solicitó asilo político en Colombia.
Según un documento de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), el exteniente Franklin Caldera Martínez fue capturado el 11 de febrero de 2021 en la localidad colombiana de Cúcuta por miembros de la DGCIM.
Lo anterior, tras ser acusado de “asociación para delinquir, terrorismo, sustracción de armas o municiones, conspiración contra la forma política y fuga”.
El documento establece que su familia recién supo de su paradero un mes después, lo que los llevó a presentar una denuncia de desaparición forzada ante la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) y ante el Grupo de Trabajo de las Naciones Unidas sobre las Desapariciones Forzadas o Involuntarias.
Recién el 22 de marzo de ese año la OACNUDH informó a su entorno más cercano que el joven uniformado había sido llevado a Venezuela, siendo recluido en el Centro Nacional de Procesados Militares (CENAPROMIL) de Ramo Verde.
Se trata de la misma prisión venezolana desde la que escapó hace un tiempo Ojeda Moreno antes de exiliarse en Chile, en donde según datos de La Radio recibió asilo político de parte del presidente Gabriel Boric.
La CIDH tras su captura, Caldera Martinez fue sometido a tortura y malas condiciones de detención.
“El 24 de febrero del 2021, recibió un disparo a quemarropa en la pierna izquierda y fue herido con una navaja en la pierna derecha, tras un intento frustrado de fuga”, detalla el documento.
Esto le habría provocado secuelas físicas como problemas para caminar y pérdida de equilibrio. Pese a esto, el organismo denuncia que no recibe el cuidado médico necesario.
Debido a la situación del exuniformado, su padre fundó el Comité de Victimas “Familia S.O.S. Libertad” para defender a los presos políticos en Venezuela, especialmente a su hijo Caldera Martinez.
Esto hizo que el hombre comenzará a sufrir acoso y hostigamientos por parte de autoridades venezolanas, de acuerdo a la CIDH.
“El 26 de enero del 2023, el señor Caldera Cordero acudió a una reunión con el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, en Caracas, cuando se percató que estaba siendo vigilado y seguido por personas no identificadas a bordo de un vehículo Chery color blanco” se lee en el texto. (Bio Bio)