El fiscal general de Estados Unidos, Jeff Sessions, rechazó el jueves las críticas del Presidente Donald Trump por su recusación de la investigación del Departamento de Justicia sobre Rusia, afirmando que ama su trabajo y planea seguir en el cargo.
«Amamos este trabajo, amamos este departamento y pretendo seguir haciéndolo mientras sea apropiado», comentó Sessions en una conferencia de prensa en la que anunció un golpe al cibercrimen.
Sessions estaba acompañado por su mano derecha, Rod Rosenstein, y el director interino del FBI, Andrew McCabe, que también fueron criticados por el Presidente el miércoles en una entrevista con el diario The New York Times.
La vocera de la Casa Blanca, Sarah Sanders, dijo más tarde el jueves que, aunque Trump estaba decepcionado por la recusación, «claramente tiene confianza en él, o no sería el fiscal general».
En la entrevista, Trump se enfrentó a los máximos responsables de la ley en su gobierno, asegurando que no habría nombrado fiscal general a Sessions si hubiera sabido que se recusaría.
El Mandatario republicano destacó también las raíces de Rosenstein en el Partido Demócrata de Baltimore y el hecho de que la esposa de McCabe aceptara dinero de un líder demócrata durante una campaña política.
Las críticas llegan tras unos turbulentos seis primeros meses de Trump en el cargo, en los que despidió a su asesor de Seguridad Nacional, Michael Flynn, y al director del FBI, James Comey, que lideraba la investigación sobre la supuesta injerencia rusa en la elección presidencial de 2016 y los posibles lazos de Moscú con la campaña de Trump.
Sessions se apartó en marzo de la pesquisa sobre Rusia, tras conocerse que no reveló en su audiencia de confirmación que mantuvo reuniones el año pasado con el embajador ruso.
El jueves se negó a reconocer las críticas de Trump: «Tengo el honor de servir como fiscal general. Es algo que va más allá de cualquier pensamiento que haya tenido para mí», declaró.(Emol Reuters)