Concretando algunos anuncios que fueron parte del Plan Chile Apoya, el Presidente Gabriel Boric firmó el proyecto de ley que fortalecerá la estabilización de los precios de las parafinas. También trazó los próximos pasos respecto de las tarifas de electricidad y transporte público no regulado, y de los precios del gas de uso doméstico. Todo ello, destacó el Mandatario, forma parte del esfuerzo por ayudar a las familias ante la persistente inflación y el escenario de desaceleración económica.
Sumando el fortalecimiento de los mecanismos de estabilización de las gasolinas y parafina, el congelamiento de los precios del transporte y el aporte complementario para que los hogares más vulnerables enfrenten el encarecimiento de los precios de los alimentos, «cerca de un tercio de la canasta total de consumo está siendo amortiguada por las medidas que está tomando el Gobierno», manifestó el ministro de Hacienda, Mario Marcel.
«El peso relativo de esa canasta es aún mayor para los hogares de menores ingresos, lo que revela un esfuerzo por tratar de amortiguar estos efectos de la mayor inflación mientras el Banco Central hace su trabajo, que es justamente reducir la inflación a niveles bajos y estables», agregó.
En el caso de las parafinas y tal como se había anunciado, se inyectarán US$ 40 millones al Fondo de Estabilización de los Precios del Petróleo (FEPP), lo que traduciría en que el precio de ese combustible «debería acercarse a los precios que tenía alrededor de febrero», dijo el ministro de Energía, Claudio Huepe. «Es difícil decir un precio de referencia porque varía mucho en función del lugar de Chile que se trate. Se estima que la Región Metropolitana debería estar en alrededor de $1.000 [el litro] después del impacto completo de este fondo», sostuvo.
Boric adelantó que próximamente enviará al Congreso un proyecto de ley para abordar las tarifas de electricidad, evitando alzas bruscas.
«Sabemos que en los servicios básicos en general y la luz en particular hay deudas acumuladas, producto de la pandemia. Y por la situación internacional podríamos tener alzas bruscas», dijo el Presidente. Detalló que se trabaja en un mecanismo que evite variaciones de ese tipo «para ayudar a los bolsillos de las familias que más lo necesitan«.
El titular de Energía agregó que el objetivo es mantener «durante el 2022 la mayor parte de las cuentas de electricidad congeladas, sin alzas. Y a partir del 2023 comenzar las alzas correspondientes de manera gradual, para que se vayan adaptando a la realidad, pero de manera suave y progresiva». Añadió que habría también tratamientos diferenciados para quienes realicen eficiencia energética.
Complementariamente, se pondrá en marcha un plan piloto que se basa en que la Empresa Nacional del Petróleo (ENAP) asuma como distribuidor mayorista del gas y algunos municipios ejerzan la distribución minorista, llevando gas a los hogares. Este modelo es escalable y partirá con una producción de 3.000 balones, lo que permitiría probar su funcionamiento y corregir eventuales errores antes de masificarlo.
«El Estado sí puede competir para que los precios bajen. Esto es abrir la puerta y cuando la abrimos no vamos a dejar que se cierre. Por lo tanto, este plan va a ir creciendo sostenidamente. Yo sé que a todos nos gustaría que los cambios sean inmediatos y ojalá pudiéramos abordar el total de los balones de gas, pero los cambios para que sean sostenibles en el tiempo hay que hacerlos de manera progresiva», sostuvo.
El ministro Huepe precisó que se va a «trabajar con los municipios para encontrar las mejores soluciones, que no son únicas sino que dependen de las regiones o localidades donde esto ocurra«. Enfatizó que este «es el comienzo del proceso y no el fin», ya que la idea es «ir creciendo progresivamente, lo más rápido que sea posible, pero asegurando que se mantienen criterios de seguridad y eficiencia». (Pauta)
