Tras una serie de reuniones sin éxito y «un debate muy tenso», la Mesa del Sector Público (MSP) y el Gobierno firmaron el protocolo de acuerdo por el reajuste salarial de los trabajadores fiscales, el cual se fijó en 2,5%.
De esta forma, la presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa, firmó en representación de 13 de los 15 gremios que aceptaron la cifra y valoró el esfuerzo hecho desde el Ejecutivo, pese a que recalcaron no estar conforme con el aumento acordado.
«Como CUT no sólo felicitamos el esfuerzo de los presidentes de los gremios del sector público, sino que también agradecemos a los ministros por este esfuerzo. Las últimas negociaciones no fueron fáciles y hoy día creo que con satisfacción podemos decir que cerramos ese proceso y ese tiempo negro en donde no había diálogo con los trabajadores ni voluntad de avanzar», indicó Figueroa.
En esa línea, recalcó que «fue un tiempo muy largo de trabajo, un debate y un diálogo muy tenso».
Cabe recordar que el petitorio inicial de la Mesa del Sector Público pedía un reajuste de 6%, pero desde La Moneda propusieron un 1,9%.
Ante el 2,5% logrado, la presidenta de la CUT afirmó: «Hoy no podemos decir que están plenamente en el ámbito económico satisfechos los trabajadores, pero sin duda que hemos avanzado sustantivamente».
A pesar de manifestar que en materia económica «no está plena nuestra aspiración», Figueroa valoró que, en términos reales, «los trabajadores están logrando un 0,7% de reajuste real», además de señalar que en materia de bonos también se ha avanzado ya que un millón de trabajadores recibirán un monto de $170.000.
Ante las palabras de Figueroa y de que no se alcanzó el reajuste esperado, el ministro de Hacienda explicó que «nosotros nos encontrábamos con la tremenda realidad de la estrechez económica y finalmente gracias a su visión y su profundo sentido de que la lucha de los trabajadores es una lucha permanente es que, por la generosidad de ellos, pudimos encontrar acuerdo»
«Esto es un mentís absoluto (algo que contradice) a el temor que algunos tratan de instalar de que negociar con los trabajadores es potencialmente un tema de inestabilidad, muy por el contrario», sostuvo el jefe de la cartera.
«Con este 0,7% real, queríamos dar una señal, de que ¡ojo!, la reactivación tiene que venir con los trabajadores, no a costa de ellos», enfatizó Eyzaguirre.
En último lugar, la líder gremial recalcó que si bien los presidentes de la Confusam y del gremio de profesores no firmaron el acuerdo, sus funcionarios sí recibirán los beneficios acordados con el Gobierno.
Ante la no adhesión por parte de dichos sectores del sector público, Figueroa manifestó que no lo toman como «una tensión», sino que «es parte de un proceso donde hay organizaciones que en sus debates no han logrado para avanzar en este protocolo». (Emol)