Las isapres siguen presionando para tener una solución que entregue estabilidad al sistema luego de que el último fallo de la Corte Suprema instruyera a la Superintendencia de Salud a definir la metodología de ajuste de los planes de las aseguradoras privadas a la tabla de factores vigente. En un comunicado, la Asociación de Isapres criticó al organismo dirigido por Víctor Torres, señalando que «la falta de celeridad en la autoridad mandatada a cumplir el fallo es grave», añadiendo que no ha convocado al sector a un análisis de riesgos y no se ha vuelto a citar la mesa de trabajo que lidera el Ministerio de Salud.
«La decisión que adopte la Superintendencia de Salud determinará si continúan o no las Isapres y, con esto, las coberturas que han elegido, de acuerdo con sus necesidades, más de 3 millones de afiliados. Si la autoridad opta por inhabilitar operativamente a las Isapres, no solo se iría en contra de lo dispuesto por la Corte Suprema, que ordenó regular el funcionamiento futuro del sistema, también se causaría un daño irreversible a la red completa, que atiende a la mitad del país, impactando en cadena a prestadores, médicos, afiliados y, especialmente, a quienes sufren problemas de salud», sostuvo el gremio.
Además, en la misiva se indica que si el gobierno opta por un cierre forzoso de las Isapres, casi 350 mil pacientes Ges quedarán desprotegidos y forzados a migrar intempestivamente a Fonasa, agravando el problema de oportunidad que tiene a casi 2,3 millones de personas en lista de espera.
«Los plazos apremian y no se evidencia que el gobierno esté ponderando el peligro de una crisis sanitaria de esta magnitud. Cabe hacer presente que las precauciones en materia de salud y el mandato de proteger la vida de las personas, son obligaciones de la autoridad que no deben desconocerse», culminó. (DF)