Israel: Herzog desata polémica por celebrar Janucá en territorio ocupado

Israel: Herzog desata polémica por celebrar Janucá en territorio ocupado

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El presidente israelí, Isaac Herzog, celebró este domingo el comienzo de la festividad judía de Janucá en la ciudad de Hebrón, en Cisjordania ocupada, lo que desató una fuerte reacción de distintas facciones palestinas.

El acto tuvo lugar en la Tumba de los Patriarcas, un sitio sagrado para las tres religiones monoteístas donde la tradición establece que están enterrados el profeta Abraham, su mujer Sara, su hijo Isaac y su nieto Jacob, también con sus respectivas esposas.

«La conexión histórica de los judíos con Hebrón, con la tumba del patriarca, con la herencia de los patriarcas y matriarcas, es incuestionable. El reconocimiento de esta conexión debe estar más allá de toda controversia«, señaló Herzog durante la ceremonia, custodiada por el Ejército y la Policía y ante la protesta de grupos de palestinos y activistas israelíes contra la visita del presidente a uno de los sitios más tensos de la región.

Hebrón es la única ciudad palestina con una colonia judía en su núcleo urbano, donde unos 1.000 israelíes viven custodiados por el Ejército en medio de fuertes medidas de seguridad y controles militares, entre una población de 200.000 palestinos.

El Ministerio de Exteriores de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) describió el evento como «un paso desafiante destinado a mostrar adhesión al movimiento colono» y «una violación flagrante del derecho internacional y el esfuerzo internacional para frenar las medidas unilaterales», y alertó que podría «reavivar la tensión» en la zona.

Por su parte, un portavoz del movimiento islamista Hamás, que gobierna de facto en la Franja de Gaza, dijo a EFE que la ceremonia de hoy en Hebrón es una demostración de apoyo a los colonos israelíes en su agresión contra el pueblo palestino y sus lugares santos, y llamó a las masas a «hacer frente a esta intrusión» y «resistir ante la provocación sionista».

El discurso del presidente israelí, en el que también instó a «seguir soñando con la paz entre personas de todas las religiones y creencias», tuvo lugar durante el tradicional encendido de velas que los judíos realizan en ocasión de Janucá, conocida también como la fiesta de las Luminarias.

Esta festividad celebra la recuperación del Segundo Templo de Jerusalén y un milagro que, según la tradición, hizo que, durante el asedio impuesto por los griegos, el aceite que tenían los judíos para un día durara ocho.

En base a esto, los judíos israelíes encenderán todas las noches, durante los próximos ochos días, una nueva vela del candelabro llamado «janukiá», de nueve brazos (uno por cada día y otro reservado para la vela que prende a las demás). (Cooperativa-EFE)

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