“Es legítimo, pero es un error en este momento buscar levantar figuras presidenciales”. Esa es la frase que de entrada lanza el presidente de Comunes, Jorge Ramírez, ante la noticia de que el fin de semana el movimiento Unir -que hoy forma parte del Frente Amplio- proclamara al diputado Marcelo Díaz como su precandidato presidencial.
Frente a esto, el timonel refuerza la decisión que había tomado el bloque días después del plebiscito: dilatar las definiciones respecto a la carrera a La Moneda y, por consiguiente, el sinceramiento de la disponibilidad de la exabanderada del FA, Beatriz Sánchez.
En ese sentido, Ramírez asegura que, pese a hoy hayan otras figuras dispuestas en el bloque, Sánchez debe ser quien lidere al Frente Amplio en ese desafío. “Dentro del FA Beatriz Sánchez sigue siendo la figura indiscutida, el liderazgo más importante y la única capaz de aglutinar al FA y sectores por fuera”, dice.
¿Por qué el FA definió dilatar la definición presidencial?
La evaluación que hace el FA es que el proceso constituyente para la ciudadanía se transformó en la instancia política más importante de este momento y, por tanto, sentíamos que apurar el proceso presidencial iba a desviar el objetivo fundamental de las fuerzas de transformación y de cambio que es tener una nueva Constitución que asegure derechos sociales a todos y todas.
Pero el resto de los sectores ya tiene a sus candidatos desplegados. ¿No están perdiendo tiempo?
Es una irresponsabilidad desde los sectores de oposición que han levantado candidaturas presidenciales buscando posicionar a su candidatos por sobre buscar la posibilidad de un programa transformador. Hay un sector de la política tradicional que sigue creyendo que lo más importante es la presidencial por sobre la construcción de un programa transformador.
Pero en ese espacio que dejaron ya le apareció competencia a Beatriz Sánchez. ¿Crees que una figura como Marcelo Díaz, que viene de la ex NM, pueda aglutinar al bloque?
Primero, es importante aclarar que el FA no tiene ninguna definición presidencial y que está volcado al proceso constituyente. Segundo, es legítimo que hayan partidos o movimientos que quieran levantar candidaturas pero, insisto, es un error en este momento. Y tercero, nos parece que dentro del FA Beatriz Sánchez sigue siendo la figura indiscutida, el liderazgo más importante y la única capaz de aglutinar alFA y sectores por fuera.
¿Cómo se resuelve una disputa entre ellos?
El FA no ha definido el mecanismo para definir a su figura presidencial. Ahora, evidentemente que las primarias legales son una herramienta democrática que el FA siempre ha puesto en el centro de sus definiciones. Pero antes tenemos que definir cuáles son las características y el liderazgo que se requiere para enfrentar un proyecto transformador como el que el FA ha levantado y yo no veo ninguna otra figura del FA capaz de liderar eso que Beatriz Sánchez.
¿Díaz tiene alguna chance contra ella?
La ciudadanía tiene que que determinar aquello. Ahora, dentro del FA no creo que haya una figura capaz de disputarle el liderazgo a Beatriz Sánchez.
¿Es la única competitiva, entonces?
Hoy es el único liderazgo capaz de aglutinar a una mayoría transformadora y de liderar un proyecto transformar que se ponga a disposición de toda la oposición y de todos los sectores ciudadanos.
Pero a pesar de que ustedes querían dilatar la definición presidencial, Marcelo Díaz ya puso el tema sobre la mesa. En este nuevo escenario, ¿Sánchez se debe sincerar ahora?
No, Beatriz Sánchez está en sintonía con la ciudadanía, quienes no lo están son aquellos que están buscando presidencializar el proceso constituyente.
¿Entonces cuáles son los tiempos?
Al menos hasta la inscripción de la lista de constituyentes el debate debe estar centrado en cómo logramos articular una lista transformadora. Después de eso el FA tiene que ver quién va a liderar el proceso constituyente en sí mismo, que permita también articular el liderazgo que va a tener que levantar el FA para las presidenciales. Por tanto, al menos hasta enero nuestro esfuerzo tiene que estar en eso en construir la unidad ciudadana y política más amplia posible, que ponga en el centro las transformaciones estructurales que Chile necesita y que proponga una radicalidad en la democracia que devuelva la soberanía a la ciudadanía.
¿No cree que la indefinición los hace pagar un costo y perder terreno frente a los otros precandidatos?
Tengo una opinión contraria a esa, porque quienes están más preocupados de levantar figuras presidenciales son los partidos políticos y no la ciudadanía. La ciudadanía está esperando de parte de la clase política la responsabilidad con el proceso constituyente y, por tanto, cada vez que se levanta una candidatura presidencial, la ciudadanía responde criticando la importancia que le está poniendo la clase política al proceso constituyente.
Pero en ese análisis, Pamela Jiles ha sincerado sus intenciones presidenciales reiteradamente y lo único que hace es crecer en las encuestas. Ella y Sánchez apuntan a un electorado parecido. ¿La indefinición de Sánchez le ha dado cancha a Jiles?
Pamela Jiles crece en la medida que hace sentido común con la ciudadanía y, por lo tanto, levanta un proyecto a todas luces que hace sentido con toda la ciudadanía, eso le da una visibilidad importante. Ahora, el 70% de la gente no ha definido su candidata presidencial según todas las encuestas, entonces el debate se centra en un sector muy minoritario de la ciudadanía. Estamos todavía a un año de la presidencial. Hay una cancha por construir que es la que aspira el FA, hacia donde apunta el FA y en esa cancha el liderazgo de Beatriz Sánchez es el más importante.
¿Ustedes podrían estar en una primaria con Jiles?
Hay que buscar articulación con todas las fuerzas de cambio y transformación, por tanto, es un debate que está abierto y no se ha cerrado en el Frente Amplio. (La Tercera)