El Estimador Mensual de Actividad Económica de Argentina registró una variación interanual nula en junio y acumuló una caída de 2,6% desde enero, informó este jueves el estatal Instituto Nacional de Estadística y Censos.
La economía trasandina está en recesión desde 2018. En mayo se había medido el único avance interanual del año con 2,4%, impulsado por las exportaciones agrícolas.
Pero la tendencia a la recuperación fue efímera y las consultoras privadas esperan a partir de ahora nuevas bajas tras la devaluación de 20% en el peso la semana pasada, con fuerte retracción en el consumo.
El gobierno argentino dijo que espera otra espiral inflacionaria a causa de la caída de la moneda y la pérdida de poder adquisitivo de la población. En los últimos 12 meses los precios minoristas aumentaron 54,4%.
El Producto Interno Bruto (PIB) cayó 2,5% en 2018. El Fondo Monetario Internacional (FMI) había calculado para este año una caída de 1,3%, pero aún no difundió una proyección actualizada.
A la cabeza de las caídas interanuales en junio estuvo el rubro Intermediación Financiera (-15%), seguido por Electricidad, gas y agua (-10,6%) y por Comercio mayorista, minorista y reparaciones (-8,6%).
Otras bajas interanuales se apuntaron en la Construcción (-7,9%), la industria manufacturera (-6,1%), la pesca (-5,6%) y las Actividades inmobiliarias, empresariales y de alquiler (-2,2%).
En cambio, crecieron los sectores Agricultura, ganadería, caza y silvicultura (+43,7%) y Transporte y comunicaciones (+1,7%).
La agudización de la crisis que arrastraban los principales sectores económicos se produjo tras el duro revés sufrido por el presidente liberal Mauricio Macri en las elecciones primarias del 11 de agosto, 15 puntos detrás del opositor kirchnerista Alberto Fernández, favorito para las presidenciales del 27 de octubre.
El último Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central estimó una caída de 1,9% en el PIB este año.
Agencias