Montes (PS) asegura rápida tramitación de R. Tributaria sin reintegración

Montes (PS) asegura rápida tramitación de R. Tributaria sin reintegración

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Mario Téllez / La Tercera CARLOS MONTES CISTERNAS - SENADOR - PARTIDO SOCIALISTA - PS - RETRATO - POLITICA

El Presupuesto 2020, que ingresó hace casi dos semanas al Congreso, es nada menos que el trigésimo erario que le toca tramitar a Carlos Montes.

El senador del Partido Socialista e integrante de la comisión de Hacienda considera que el diseño financiero presentado por el Ejecutivo para el próximo año tiene “bastante inercia y continuidad” respecto a 2019, desestimando -en su opinión- que sea “audaz y reactivador” como lo planteó el ministro de Hacienda, Felipe Larraín.

Eso sí, el parlamentario -quien ingresó al Congreso como diputado en 1990 y es senador desde 2014- asegura que más allá del debate entre gobierno y oposición, su postura es mejorar el proyecto: “Trato de que esto se apruebe y que el gobierno se abra, no creo en que haya que dejar el Presupuesto desequilibrado o mal. No es mi idea”, dice.

– ¿Qué le ha parecido lo que ha visto del Presupuesto?

– No he visto mayores novedades, es bastante de continuidad el Presupuesto, bastante de inercia. Es cierto que hay un menor crecimiento del gasto público que en otros años, pero lo más nuevo es la creación del ministro de meter como ingresos los US$ 400 millones de una reforma tributaria que todavía no es ley, lo que es bien raro y nunca ha ocurrido y esto puede sentar un muy mal precedente. Además, hemos descubierto que ahí hay una parte de los ingresos que son absolutamente transitorios.

No llegó mucha información nueva a la que hemos tenido siempre, largos discursos que a veces podrían ir a lo más sustantivo. A los ministros de Hacienda les gusta que haya poco debate.

En lo particular, no creo que sea un Presupuesto muy audaz ni creativo. Siento que hay una realidad nueva en el mundo y que Chile sigue caminando como que eso no existiera. Entonces, en el Presupuesto el impulso fiscal no se ve en sus ejes principales más allá de un año, no se ve que se esté asumiendo el cuadro internacional.

El FMI va a entregar por estos días su estudio sobre las tendencias internacionales y si ese informe dice que las cosas son peores a lo esperado, debería hacer pensar a lo menos al gobierno.

Me llama la atención lo que están haciendo algunos países como Alemania, que están haciendo todo lo posible para evitar un cuadro de recesión. Una recesión en Alemania es una recesión en Europa, eso también va a influir en Chile. Tenemos un cuadro de comercio mundial que obliga a tener una respuesta apropiada para el momento internacional.

– ¿Qué propone en esa línea? ¿Un mayor impulso fiscal?

– Algo muy en línea a lo que se está discutiendo en Europa, de si se le pone más énfasis al impulso fiscal o no. Yo estoy convencido que el impulso fiscal es netamente de inversión, de proyectos buenos, no en cualquier proyecto sino que tengan impacto en el Producto potencial, como en infraestructura, tecnología, en capacitación laboral. ¿Hay un espacio para hacer esto? Esa es la pregunta que uno se hace. El gobierno ha sido muy cortoplacista, no asumiendo el momento que se está viviendo.

¿Cómo financiar eso? Las fuentes son cuatro: reasignaciones que se pueden hacer para mejores proyectos; usar los fondos soberanos; un mayor endeudamiento porque está barato el crédito y Chile es un país poco endeudado, por lo que veo margen para pensarlo; y un rol más activo de parte del Fondo de Infraestructura.

– ¿Ve disposición del Ejecutivo a discutir un tema como este? El ministro Larraín dijo que la audacia tenía límites y puso como ejemplo a países de la región como Argentina o Venezuela.

– Podemos tener diferencias con el gobierno, pero yo solo pediría que haya espacio para realmente discutir esto. Es refácil descalificar y decir que no podemos endeudarnos, pero nadie está planteando endeudarse desenfrenadamente más allá de los márgenes. Aparte, esta es una asociación público-privada, el Estado invierte para impulsar al sector privado, para generar empleo.

– ¿Tenía expectativas más altas para el Presupuesto?

– La palabra audaz me desconcertó, pero no tenía mayores expectativas. Espero que la oposición entre más globalmente en este debate sobre el crecimiento y las perspectivas de más largo plazo. Los motores de crecimiento de la economía se están agotando y hay que repensarlos.

– ¿Por qué no lo convence un crecimiento de la inversión pública de casi 7% en 2020, como propone Hacienda?

– El punto de partida es muy bajo, hace mucho estamos reclamando que en 2018 se incluyó en la inversión pública el gasto militar, lo que hizo crecer el gasto en inversión pública 0,9%. Si no, habría bajado 3,3%, eso no se había hecho nunca. Además, aún no está claro cuánto será el crecimiento de la inversión pública en 2019, Hacienda no dio su estimación durante la presentación de la semana pasada.

– Pero la inversión pública ha crecido fuerte en julio y agosto.

– Sí, pero viene desde una base muy baja, ya que los ministerios con más inversión, como Vivienda, Educación y Obras Públicas, estaban con bajos niveles de gasto de capital. No termino de tener claro respecto a qué se prevé un crecimiento de 7% de la inversión pública, ese crecimiento pueden ser solo US$ 500 millones, eso no es mucho. Por eso hablamos de un plan de inversión a tres años, para buenos proyectos que activen la economía y muevan al sector privado.

– ¿No despejaron sus dudas las presentación de Hacienda y la Dirección de Presupuestos?

– El año pasado ya le dijimos al ministro que estaba partiendo desde la base de supuestos muy optimistas, también le pedimos un plan de largo plazo en inversión en infraestructura. Tuvo nueve meses de este año para prepararse. Si uno mira el debate del Presupuesto 2019, es el mismo que se da hoy.

Yo estoy convencido que a mitad de año si las proyecciones internacionales son las que se están planteando hoy, vamos a necesitar fortalecer el impulso fiscal. Tenemos recursos, la plata que hemos ahorrado con los años en coyunturas malas es para no desacelerarse más allá de lo debido y, también, para aprovechar oportunidades que nos abre el escenario internacional.

– El presidente Piñera dijo la semana pasada que a algunos en la oposición les gustaría que la economía no despegara, luego del Imacec de 3,7% en agosto.

– Como oposición, no es que uno no quiera que Chile crezca, todo lo que hemos dicho es en función de crecer más. Nosotros queremos que haya crecimiento económico, porque sabemos que la desaceleración afecta a todos, particularmente a los trabajadores.

– Algunos en la oposición ven con inquietud que el ingreso adelantado del Presupuesto implique que el despacho deba ser antes del 26 de noviembre, ¿les pone una presión adicional?

– Tener una semana menos genera problemas para el debate y le achica el espacio a la oposición, y al final si no se aprueba el Presupuesto queda el proyecto que presentó el gobierno.

Además, se pretende que la comisión de Hacienda avance en reforma tributaria en paralelo con esto y vamos a tener que disminuir las sesiones por reforma tributaria porque no nos alcanza el tiempo para estar en ambas cosas.

Creo que ya el próximo lunes no podremos sesionar por reforma tributaria porque tenemos que dedicarlo a Presupuesto.

«SI SE RETIRA INTEGRACIÓN, TRAMITACIÓN SERÍA MAS CORTA»

– Usted ha sido uno de los principales críticos a ampliar la exención del IVA a la construcción en la reforma tributaria. ¿No está dispuesto a aprobar ese artículo?

– Si queremos favorecer a la clase media, hay otras formas de hacerlo, por ejemplo con subsidios directos a la demanda o a proyectos. Esto seguro que si esto se conversa con la Cámara de la Construcción y con los empresarios, les puede interesar. Quiero decir que lo que ha planteado el gobierno no es la única visión, la Cámara de la Construcción considera que esto es un enredo para ellos y dicen que están dispuestos a rediseñar los instrumentos de promoción.
Parece algo popular esta franquicia del IVA, ¿pero usted cree que los sectores medios están en condiciones de comprar casas de 5.500 UF?

– Han pasado dos semanas bien intensas con audiencias sobre la reforma en la comisión de Hacienda. ¿Ha cambiado la visión que tenía del proyecto?

– Hay visiones bien contradictorias, hay gente que pareciera que participó en la elaboración del proyecto, porque conocen hasta el último rincón del proyecto. Creo que las críticas de Andrea Repetto y Rodrigo Valdés son sustantivas, van al corazón mismo y demuestran lo que significa la reintegración, quiénes son los beneficiados y qué impacto podría tener en crecimiento e inversión, los cuales son mucho más bajos que lo que el gobierno plantea. Todos los expositores han dicho que es posible solo integrar a las PYME y no a las grandes. Uno no entiende por qué el gobierno quiere integrar a las grandes empresas.

– En este minuto, ¿usted votaría en contra de la integración?

– Sí, yo no la aprobaría, de ninguna manera.

– ¿Hay consenso al respecto entre la oposición dentro de la comisión de Hacienda?

– Hasta el momento, es totalmente unánime, y todos hemos fundado eso de distintas maneras. No he visto dudas dentro de la oposición en la comisión de Hacienda.

– ¿Cuándo estarían en condiciones de votar la idea de legislar?

– Creo que esto se puede ir atrasando. Todo depende de si el gobierno se abre o no a una modificación más sustantiva. Hasta el momento, no ha dado ninguna señal. Si el gobierno retira la integración, eso pone un cuadro totalmente distinto y sería mucho más corto el tiempo de tramitación y de todas maneras saldría este año. El gobierno tiene que pensar pucha, he gastado todo este tiempo, no puedo aprobar la reforma con un voto porque eso genera un problema en un tiempo más. Lo contrario, es muy cortoplacista, en materia tributaria lo óptimo es que haya un nivel de acuerdo mucho mayores.

LAGOS WEBER

Por su parte, el senador PPD Ricardo Lagos Weber, presidente de la comisión de Hacienda del Senado, aseguró que si el Gobierno llegase a explorar otros mecanismos distintos a la reintegración en la reforma tributaria, estos «ciertamente« que serán bienvenidos.

Esto luego que el ministro del Interior, Andrés Chadwickse abriera a negociar la reintegración -el denominado corazón del proyecto- para sacarlo adelante en el Senado, asegurando en TVN que «las herramientas nunca deben ser dogmas», aunque horas más tarde aclaró a La Tercera que en el Gobierno están convencidos de que es el mecanismo «más eficaz» para lograr los objetivos del proyecto.

«Lo rescatable de las declaraciones del ministro Chadwick es que la reintegración no es un fetiche y que lo que él persigue son fines generales, como la inversión, el empleo, etcétera», comentó Lagos Weber, contrario a la reintegración tributaria.

«Yo le agregaría algo que él no mencionó, que es la justicia tributaria y por eso es que rechazamos la reintegración. Si el Gobierno está en condiciones de explorar otros mecanismos que, preservando el concepto de que equidad tributaria fomenta la inversión, ciertamente que son bienvenidos«, expresó.

En todo caso, aseguró el senador, «habría que escuchar en esta materia al ministro de Hacienda«.

FONTAINE: «REINTEGRACIÓN ES CENTRAL»

En conversación con El Diario de Cooperativa, el titular de Economía, Juan Andrés Fontaine, salió al paso de las declaraciones de Chadwick, precisando que «no hay ninguna negociación específica«.

«El Gobierno ha sido muy claro respecto de que la reintegración es un elemento central de su proyecto de modernización tributaria y el mismo ministro del Interior después aclaró que sus palabras no debían entenderse en ese sentido», aseguró.

Fontaine indicó «en el Parlamento se está discutiendo este proyecto, obviamente el avance es difícil de prever«. (DF-Cooperativa)

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