Miembros del Opus Dei han manifestado su desconcierto frente a las definiciones valóricas expresadas por el recién asumido ministro del Interior, Mario Fernández, por cuanto él pertenece a «la obra» y ha manifestado al mismo tiempo estar de acuerdo con el programa de gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet, que incluye: la despenalización del aborto en tres causales y el matrimonio igualitario, entre otras materias.
El secretario de Estado dijo a El Mercurio que «respecto del derecho a la vida tengo la convicción de que el proyecto (de aborto) de la Presidenta no lesiona mis convicciones religiosas (…) no estamos frente a un proyecto de aborto».
Según consigna el matutino, integrantes de la agrupación religiosa ultraconservadora reconocieron que les causó asombro que un miembro de sus filas respaldara tan abiertamente el programa de la actual administración.
«El derecho a la vida forma parte del ADN de un creyente. Y él está invirtiendo todo su capital en la lealtad hacia la Presidenta», dijo un miembro del Opus Dei.
Asimismo, aseguran que no se «entiende que viva su convicción de fe hacia adentro, pero no hacia fuera» y si bien comparten que no existe «contradicción» entre su nuevo puesto y su opción religiosa «todo tiene un límite».
Al respecto, el diputado DC Jorge Sabag, perteneciente a la prelatura, señaló: «En el Opus Dei no se le da instrucciones a nadie. Pero creo que es una incoherencia por cuanto el año 2008 dijo que la píldora del día después atentaba contra el derecho a la vida y ahora dice que el proyecto de aborto en tres causales no afecta el derecho a la vida. Que me explique cómo resuelve esa ecuación».
«No sé qué razones puede haber tenido para expresar ese punto de vista respecto al aborto, que efectivamente a mí me ha sorprendido porque no eran las ideas que sostuvo en el TC cuando concurrió al fallo de la píldora del día después. Yo confío en que después de estudiar con detenimiento el proyecto, él cambie su punto de vista», declaró el ex presidente del Tribunal Constitucional, Raúl Bertelsen, integrante del Opus Dei y conocido por su cercanía con el ministro Fernández.
En esa misma línea, el académico y también miembro de la agrupación, Joaquín García-Huidobro, expresó que ha habido críticas injustas hacia Fernández «porque piensan que ha vendido sus convicciones por unas gotas de poder. La razón de su conducta actual es muy distinta: simplemente se ha tragado una mala filosofía, que lo lleva a aceptar algo que inaceptable. Pero una cosa es estar equivocado y otra muy distinta es haber traicionado sus convicciones más íntimas con tal de ser ministro».
Por otro lado, en la prelatura afirman que parte de la molestia se genera porque los miembros de «la obra» deben rendirle «obediencia» a lo que dice el Papa. «¿Y qué más claro que lo que ha dicho el Papa en estos temas?», agregan.
En tanto, el decano de la Facultad de Derecho de la Universidad de los Andes, Alejandro Montero, indicó que «en el Gobierno conviven dos humanismos: el humanismo ateo y el humanismo cristiano. Lo que está haciendo (Fernández) es hacerle un guiño al humanismo ateo (…) el humanismo ateo, bajo la bandera de la reivindicación de la libertad sexual o del pluralismo, instan por introducir un cambio que el derecho no puede amparar nunca, como es privar de la vida a un inocente». (El Mostrador)