«En este debate mi posición es que debemos cautelar un equilibrio muy delicado entre la confianza depositada en nosotros y el retroceso que significaría un gobierno de derecha», sostuvo el diputado del Movimiento Autonomista, Gabriel Boric, respecto de la segunda vuelta presidencial.
«Lo que debemos hacer, por tanto, más que llamar o no a votar por Guillier es colaborar en dar un debate de fondo sobre las ideas que hemos defendido, sobre las que Guillier debe pronunciarse, y que nos han dado la representación que hoy tenemos», aseguró a La Tercera.
«Hay diferente tesis, pero no me cabe duda que llegaremos a acuerdo. En lo que tenemos consenso es que no pretendemos negociar ningún tipo de cargo, que el debate debe ser público, que no tenemos propiedad sobre los votos y, por ende, lo que nos corresponde es plantear una interpelación en torno a los ejes de nuestro programa», agregó.
«Estamos plenamente conscientes de que Piñera significa un retroceso para Chile, pero no es claro que Guillier signifique un avance. En su programa de última hora no se señala ninguna reforma sustantiva más allá de lo que hoy existe. Y quienes votaron por nuestro programa -añadió- lo hicieron por transformaciones más profundas que las que se han impulsado hasta hoy. Por lo tanto, la responsabilidad de convencer a quienes votaron por nosotros es de Guillier», continuó.
Consultado por la incorporación de Fernando Atria (PS) al comando de Guillier, Boric afirmó: «Es una persona por quien tengo el mayor de los respetos, y me hubiese encantado que hubiese sido candidato por nosotros, pero poner a determinadas personas sin comprometerse a transformaciones concretas no pasa de ser un gesto, y los gestos no bastan para ganar una elección».
De acuerdo al diputado, los ejes programáticos para convencer al Frente Amplio son «no más AFP, condonar el CAE, negociación por rama, impuesto a los súper ricos, royalty minero, apuesta por la educación pública (expansión de matrícula y financiamiento a la oferta) y gratuidad en todos los niveles; seguro universal de salud, poniendo fin al negocio de las isapres; posnatal para los padres; descentralización efectiva; territorio y autonomía para los pueblos originarios, y asamblea constituyente».
«Son hartas cosas, pero el problema, justamente, es que el programa de primera vuelta de Guillier no tenía ninguna reforma sustantiva en estas áreas. Guillier no va a ganar si no propone reformas en serio en estas dimensiones», concluyó.
El Mostrador/La Tercera