A cuentagotas el segundo gobierno de Sebastián Piñera ha ido comunicando las designaciones en las embajadas tras su arribo a La Moneda. Los anuncios se han prolongado a través de los casi cinco meses que lleva la administración, y el último fue el nombre del representante de Chile en EE.UU.: el actual subsecretario de Relaciones Exteriores, Alfonso Silva.
Pero todavía quedan nominaciones clave pendientes. En cuanto a las embajadas, las de Francia e Italia -donde en principio llegaría Pedro Pablo Díaz, quien luego lo descartó- aún se encuentran acéfalas. Otro tanto sucede con las agregadurías, cuya designación también es facultad del Presidente.
Una alta fuente de La Moneda afirma que el Mandatario pidió a Cancillería evaluar con atención y caso a caso los lugares o embajadas que requieren la presencia de un agregado, tratando de reducir gastos a través de la disminución de cargos. Todo ello, explica la misma fuente, en función del plan de austeridad que la administración ha empujado desde el cambio de mando de marzo pasado.
Desde Palacio descartan que ello lleve a que sencillamente no haya agregados en las representaciones chilenas en el extranjero. “Por supuesto que va a haber, pero con austeridad”, señala la alta autoridad de Gobierno a La Tercera PM.
Consultado el ministerio, sólo respondieron que “la Cancillería está evaluando los nombramientos a realizar”. Esto incluye la valoración de las destinaciones que ameritarían una agregaduría como de los listados que los partidos de Chile Vamos enviaron para este propósito. Extraoficialmente, en RR.EE. plantearon que ya en el primer gobierno de Piñera hubo menos nombramientos de los que la ley permitía en ese momento, por lo que esta vez se debiera continuar con esa tendencia, más aún en un escenario de estrechez fiscal.
¿PARA QUÉ ESTÁN?
Para realizar su función, los embajadores no sólo se apoyan en un equipos de profesionales que pertenecen al ministerio de RR.EE. También lo hacen en personal contratado localmente y en los agregados, que pueden ser económicos o comerciales, agrícolas, laborales, culturales, de prensa y militares, entre otros.
La ley 21.080 aprobada este año que modernizó el ministerio de RR.EE. establece que el Presidente podrá designar hasta 33 agregados a contrata para desempeñarse en el exterior, “según lo requieran las conveniencias del Servicio”. Como única exigencia se plantea que quienes sean designados en esta calidad “deberán poseer tanto la experiencia como un idioma que sean adecuados al desempeño de las funciones que se les asignen, según lo disponga el respectivo reglamento”.
En su anterior gobierno, Sebastián Piñera priorizó el nombramiento de agregados comerciales, los que dependen de la Dirección General de Relaciones Económicas Internacionales (Direcon). Según las cifras de Gobierno Transparente, de un total de 35 designados, 18 fueron comerciales.
En 2014, Michelle Bachelet nombró a un total de 42 agregados comerciales, laborales, culturales, de prensa y científicos en 25 países. Entre ellos destacaron el ex futbolista Carlos Caszely como inédito agregado deportivo en España; Javiera Parada -hija de Estela Ortiz, amiga de la exmandataria- como agregada cultural en Washington; y María Angélica Álvarez (“Jupi”) como agregada de prensa en Italia. Los sueldos fluctuaron, según la información de Gobierno Transparente, entre los US$ 1.775 y US$ 3.257, incluyéndose algunos funcionarios ad honorem. (La Tercera)