No será fácil combatir la violencia en Chile porque el crimen organizado logró instalar su negocio en una plataforma extremadamente potente que está convocando múltiples causas complementarias (ni que hubieran tomado un curso de estrategia en Harvard. Ahora todos quieren basar sus negocios en plataformas imitando a las empresas más valoradas).
Las plataformas son infraestructuras que conectan y coordinan; permiten cumplir en forma simultánea y sinérgica los propósitos o causas de múltiples grupos convocados.
Hoy son muchos los grupos que están usufructuando de la plataforma 18-10 para lograr sus distintas causas y objetivos sinérgicamente.
Distintos grupos de delincuentes, barras bravas, narcotraficantes y extremistas han mejorado radicalmente su productividad en el cumplimiento de sus objetivos o causas, convocándose en torno a la plataforma 18-10, para así saquear juntos cientos de locales comerciales y aplicar sus métodos violentos, como ataques y quemas de cuantiosa infraestructura pública y privada, incluidas 19 estaciones del metro en simultáneo y 131 cuarteles de Carabineros el primer mes.
Los grupos violentos se apoyan entre sí y usufructúan de las convocatorias a movilizaciones pacíficas que proporcionan el contexto ideal para blindar sus operaciones.
Estos llamados a movilizaciones y paralizaciones pacíficas las convocan políticos, congresistas y organizaciones gremiales y ciudadanas (MUS, la Mesa de Unidad Social, agrupa 70 de ellas) por distintas causas, la mayoría loables: no + corrupción, no + privilegios, no + abusos, no + mentira, no + desigualdad, no + ingresos miserables, no + deudas impagables, no + colas en los hospitales, no + AFP, no + CAE, no + TAG, etcétera.
Los grupos violentos súper empoderados tienen en jaque nuestro futuro como nación democrática y próspera. Es difícil exagerar el peligro en que vivimos.
Y como si fuera poco, temo que algunos actores políticos y activistas, con grandes capacidades de convocar manifestaciones en la calle, también estén usufructuando y empoderando la plataforma, satisfechos por el aumento de la efectividad que han logrado en sus causas particulares al complementar sus capacidades con el accionar de los grupos violentos.
Patricio del Sol G.
PhD Stanford University