Tras reunirse esta jornada con los funcionarios del Registro Civil en paro desde hace 37 días, la ministra de Justicia, Javiera Blanco, fue enfática: «Mes que no se trabaja, no se paga», dijo. Sin embargo, esto no fue lo único polémico que dejó la alocución de la secretaria de Estado en La Moneda, ya que una imagen captada en ese momento ya está dando que hablar.
Todo esto, a causa de una hoja que portaba la ministra al momento de hablar ante los medios de prensa, la que fue captada por los reporteros gráficos que se encontraban en el lugar. En ella, se puede leer la supuesta contraoferta realizada por los funcionarios movilizados, donde se establecen ciertos montos a cumplir.
Así, en un extracto del documento se puede leer que «respecto al ‘monto … de $1.500.000.000 para mejoramiento de remuneraciones’, señalamos que esta cifra dista mucho del ofrecimiento inicial, aun cuando estamos dispuestos a negociar en tanto exista una disposición real de acercarse a la cifra».
«Esto es, de un total inicial de $3.000.000.000 estipulados inicialmente, este directorio considera como monto mínimo aceptable un total de $2.494.800.000,lo que se traduciría en un monto anual de $792.000 por funcionario pagadero en 8 meses con una cuota de $99.000 cada una», agrega la carta.
En la misiva, además se establece que «en cuanto a la ‘creación de un nuevo instrumento, cuyos criterios serán establecidos en una mesa técnica’, referimos que los funcionarios del Registro Civil -y por cierto este Directorio- valora significativamente la apertura a reconocer después de 35 días de movilización, el instrumento trabajado en forma conjunta por la Dirección Nacional del Servicio y el Ministerio de Justicia, que también fue acordado y visado por esta Asociación».
La imagen fue tomada luego de que la ministra Blanco criticara la postura de los funcionarios del servicio de continuar con el paro de actividades, principalmente por la falta de un acuerdo respecto a los montos a recibir.
Sin embargo, las palabras de la secretaria de Estado tuvieron una rápida respuesta de la líder de los trabajadores movilizados, Nelly Díaz, quien recalcó que «con amenazas no vamos a solucionar problemas».
«Cuando uno se desespera, habla cosas que no corresponde, creo que amedrentar a los funcionarios ya no dio resultado en el Registro Civil», dijo la dirigente.
