El menor ritmo de ventas inmobiliarias de este año fue adelantado por la industria. El 2015 alcanzó cifras históricas difíciles de repetir, pero ahora las compañías están poniendo números a la disminución de la actividad.
Ese es el caso de la inmobiliaria Paz Corp, la que en una presentación dirigida a inversionistas socializó las perspectivas de venta para la industria este año en la cap
De acuerdo a los números de la inmobiliaria, este año en la capital se venderían 24.584 departamentos, una disminución de poco más de 10 mil unidades, si se les compara con 34.625 unidades transadas el 2015. Esta cifra sería la menor desde 2012.
En cuanto a montos, se venderían en el mercado de departamentos en Santiago 75,6 millones de UF (alrededor de US$ 3.032 millones), equivalente a una disminución del 30% respecto a los 106 millones de UF de 2015. En monto, las transacciones bajarían para la industria en US$ 1.240 millones.
Pese a lo abultado de la caída, en la industria no se desesperan y recalcan que es una actitud sana. “Nuestra visión es que la industria se ha ido adaptando ordenadamente a este ajuste de manera de lograr niveles de stock adecuados en función de la menor venta”, comenta el gerente general de Paz Corp, Ariel Magendzo.
Explica que la proyección de 10 mil unidades menos corresponde a aproximadamente un 30% menos que el 2015, lo cual está en línea con lo que la industria en general viene proyectando. “En ese sentido, es un ajuste que se esperaba luego de la actividad por sobre el promedio que se tuvo durante el 2015”, opinó.
Añadió que si se mide en UF, “los niveles proyectados para el 2016 son levemente superiores a los del 2014, que fue un buen año. El fenómeno ocurre porque es de esperarse que el mercado se ajuste a sus niveles de promedio de largo plazo, luego de un 2015 con actividad sobre lo normal”.
¿Impactará al margen de las compañías? Magendzo dice que el monto de las transacciones no es igual a las utilidades y proyecta que las inmobiliarias deberían presentar márgenes similares a 2013 y 2014, periodos, dice, saludables para la industria.
POR SEGMENTOS
Respecto al análisis por segmento, no existe consenso en la industria sobre cuáles serán los más impactados. “Proporcionalmente creemos que la disminución será similar en todos los segmentos, aunque el de vivienda social debería verse beneficiado por los programas de subsidios especiales que ha impulsado el Ministerio de Vivienda”, sostiene Magendzo.
A su vez, el gerente general de Inmobiliaria Inspira, César Kattan, opina que los segmentos bajo las UF 3.500 serán lo más impactados por su sensibilidad a la coyuntura económica. “Además, el tema del IVA y la restricción del financiamiento del 80% para los créditos hipotecarios, les golpean directamente. El aumento en precio por temas de IVA para los segmentos más bajos puede llegar a un 11%, mientras que para los segmentos sobre las UF 7.000, el alza es equivalente a 4% en precio”, argumenta.
“Lo que se ha visto en estos primeros seis meses de venta es que los segmentos altos (sobre las UF 7.000) siguen con una venta fuerte y hay mucho dinamismo en este mercado, incluso con niveles muy similares a los del primer semestre del 2015”, agrega.
El gerente general de Tren Inmobiliario, Eduardo Risso, sostiene que serán las familias de los segmentos medios a las que se les hará más complejo concretar la compra de una vivienda. “Las medidas del gobierno han ido en desmedro de la clase media. Esto se evidencia tanto en el mercado de casas como departamentos, y en las comunas donde viven estas familias, como Santiago Centro, Ñuñoa, Maipú, Quilicura, Estación Central, Macul, entre otros”, sostuvo.
“Es evidente que la industria va a vender un porcentaje menos, mi conclusión es que el panorama no es alegre pero tampoco dramático”, dijo. (DF)