R.Izikson (Cadem): “No soy responsable de que B. Sánchez no llegara al...

R.Izikson (Cadem): “No soy responsable de que B. Sánchez no llegara al balotaje”

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Los resultados de las elecciones nos golpearon. Al principio del día estaba feliz, porque habíamos acertado el porcentaje de participación. Me informaron que el gobierno estaba estimando en 6,6 millones las personas que fueron a votar. Eso es lo que habíamos dicho. Era lo más complicado de estimar y, si estábamos en lo correcto, significaba que podíamos acertar en los otros resultados. Lo celebrábamos por WhatsApp con el resto del equipo. Luego empezábamos a ver los primeros resultados. Con el 20% de las mesas escrutadas nos dimos cuenta del error: sobrerrepresentamos la votación de Sebastián Piñera y subestimamos la de Beatriz Sánchez. No era lo que esperábamos.

Nos equivocamos al calcular el voto probable. El total de la muestra que manejábamos daba los mismos resultados que luego se dieron en la votación. Eso no lo vimos y es lo más doloroso. Intentamos sacar los votos probables y eso nos pasó la cuenta. Votó más gente en Santiago y más jóvenes de lo que habíamos calculado. Fue un error de interpretación.

Mi padre murió cuando tenía siete años y eso marcó mi carácter.
 Me tocó vivir ese momento complejo que determinó mi forma de ser. Soy una persona muy concreta y bien lógica. Siento que la vida es corta y cada momento hay que vivirlo rápido. También marcó la forma de relacionarme con mis hijos. Trato de ser buen papá, muy de piel y con mucho cariño. Como no tuve un padre, trato de tener ese trato con ellos.

Con mis amigos tenemos un equipo de fútbol que se llama Joga Piola. Lo fundamos cuando estaba de moda el Joga Bonito, pero como éramos malos, le pusimos Piola nomás. Antes jugaba todos los fines de semana, pero con los hijos lo he dejado. Soy hincha de la U y ya casi no voy al estadio. Ahora sigo más la liga inglesa que el campeonato chileno.

Mi hobbie son los vinos. 
Me gusta el asado con mis amigos, que parta temprano y termine tarde, compartiendo un buen vino. Tengo una pequeña cava en la casa. Estoy aprendiendo harto de ese mundo.

Esta semana he recibido amenazas de muerte. Ha habido dos grandes críticas por la encuesta, una más racional y otra más apasionada. He tratado de responder todo, pero con algunos es imposible. Sobre todo en redes sociales. Me escriben: “Judío, te voy a matar”, cuando no soy judío. El otro día una persona llamó a Cadem solo para putearme. Le dije que fuera a mi oficina. Nos tomamos un café y le pude explicar lo que había pasado.

No soy responsable de que Beatriz Sánchez no haya pasado a segunda vuelta. El 7 de julio la encuesta Cadem dijo que podía pasar a segunda vuelta. Mientras todos decían que el Frente Amplio estaba sobrerrepresentado, acá estaba el tipo que decía: ‘Ojo, ella puede llegar a segunda vuelta’. Y lo dijimos por casi tres meses. Nosotros no tenemos el poder para manipular la elección. Me gustaría juntarme con ella, mostrarle los números y explicarle lo que ocurrió.

Me gusta la tecnología, pero los millennials me han superado. Desde al Atari en adelante, siempre he tenido una consola en mi casa. Ahora juego Fifa en mi PlayStation 4. Siempre sentí que estaba bien arriba de la ola tecnológica, pero siento que llegué a una edad en que la modernidad me está pasando por encima.

Con Sebastián Piñera no somos amigos.
 Mientras trabajé en el gobierno tuvimos una relación que fue de menos a más. Al principio no hablábamos tanto. Nunca fuimos cercanos, nuestra relación era laboral. Entiendo que me vinculen al Piñerismo, pero no existe esa relación. (La Tercera)

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