El rector de la Universidad de Los Andes, José Antonio Guzmán, se refirió la mañana de este lunes a la aprobación de la glosa de la gratuidad tras los ajustes que ingresó el Gobierno, como reducir los recursos del Aporte Fiscal Indirecto (AFI) para redistribuirlos en otras áreas de la educación superior.
En esa línea, si bien dijo comprender los «fundamentos» del Gobierno para adoptar la medida, cuestionó la decisión indicando que algunas Ues se verían perjudicadas por la disminución de estos montos, que serán reasignados sólo entre los planteles que integran el Consejo de Rectores (CRUCh), y en algunas privadas que adscriban a la gratuidad.
«Hay caminos y caminos para asignar los recursos públicos; el AFI se implementó para premiar la calidad de las universidades, lógicamente tiene que haber otros canales de financiamiento público que contribuyan a beneficiar a alumnos de sectores más desfavorecidos», dijo el rector en conversación con «Tele13 Radio».
No obstante, indicó que «hay un claro abuso» debido a que «los que nos vemos perjudicados somos unos pocos, unas cuatro universidades, que no tuvimos ninguna injerencia; es injusto y discriminatorio».
Asimismo señaló que el tema central es «la mirada que el Estado tiene sobre las universidades privadas, las privadas construyen con bienes públicos muy importantes» agregando que hay «un menosprecio por parte del Estado» a esas instituciones.
«Nosotros egresamos a alrededor de 1500 profesionales de primera categoría, ese es el principal aporte público que uno hace», remarcó.
Con todo, el rector de la U. de los Andes dijo que si bien «aquí sólo estamos hablando de plata» al mismo tiempo «estamos definiendo cosas muy importantes y que van a afectar la discusión de la reforma» a la educación superior, que ingresará el Gobierno.
Por otro lado, Guzmán dijo que el Consejo de Rectores (CRUCh) es una institución «anacrónica» y que hay otro problema «y es que en el fondo, el gran foro donde se discuten las políticas universitarias es el CRUCh y nosotros estamos fuera, falta resonancia para que nuestras ideas lleguen adecuadamente».
«Creo que si el CRUCh hiciera honor a su nombre debería admitir a todas las universidades», sostuvo, ya que «aquí está la mitad de los actores sentados en la mesa y la otra no está».
