Tres fueron los nudos críticos que consensuaron los rectores de las universidades del Estado y el ministerio de Educación, respecto del proyecto de planteles estatales, los cuales comenzarán a ser trabajados la próxima semana y que apuntan a un rediseño del modelo de gobierno universitario, una revisión sobre las condiciones laborales en que quedarán los funcionarios administrativos y un mayor financiamiento para el desarrollo de las instituciones.
Sobre este último punto, el vicepresidente del Consorcio de Universidades del Estado y rector de la Universidad de Antofagasta, Luis Loyola, indicó que los fondos que se destinan en la iniciativa son ínfimos para las instituciones y que el proyecto tampoco dice nada sobre el incremento de matrícula, puntos fundamentales si se pretende un verdadero fortalecimiento de estos planteles.
El proyecto de universidades estatales contempla un préstamo de 150 mil millones de pesos del Banco Mundial, por un período de 10 años para las 18 instituciones, y cuya implementación está siendo trabajada con el Gobierno.
La jefa de la División de Educación Superior, Alejandra Contreras, indicó que la distribución de los recursos apunta a desarrollar un trabajo más colaborativo entre las universidades del Estado, pero que cualquier petición de montos adicionales tendrá que ser discutido en el Congreso.
En cuanto al gobierno universitario que propone el proyecto, el rector de la Universidad de Talca y director del Cuech, Álvaro Rojas, indicó que este debe tener un carácter más académico y resolutivo; reiterando que para el caso de la Universidad de Chile, es impracticable su aplicación debido al ordenamiento orgánico que ya tiene esa institución.
Sobre este punto, la jefa de la División de Educación Superior, aseguró que se estudiará la forma de excluir a la Universidad de Chile de ese diseño, y que también se realizarán ajustes para que pueda ser implementado en las demás instituciones. (Bio Bio)
