Reflexión para indecisos

Reflexión para indecisos

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Se afirma con razón que el voto se ha vuelto volátil, es decir, que los electores deciden en cada ocasión según criterios circunstanciales más que por afinidades ideológicas o culturales. Esto es válido para un porcentaje significativo de personas, que se ufana de su calidad de independientes. Su opción puede ser decisiva.

Movidos muchas veces por la desconfianza hacia los políticos y los partidos, su primera decisión tiene que ver con participar de la elección o abstenerse. El voto voluntario legitima esa disyuntiva. No obstante, en Chile la participación electoral viene descendiendo desde fines de los 90, cuando regía el sistema de inscripción voluntaria y voto obligatorio.

La propensión para votar aumenta cuando las personas perciben que lo que está en debate es algo sustantivo, que puede afectar sus vidas. El plebiscito de 1988 sobre la continuidad de Pinochet es una prueba clara de lo anterior.

La primera interrogante es saber si el actual cuerpo electoral estima que la elección próxima es crucial. Las encuestas dan a entender que la concurrencia a las urnas puede ser un poco mayor que la media, pero no sabemos a ciencia cierta el porcentaje de votantes, ni su composición social y etaria, lo que puede incidir en el resultado y alterar los pronósticos.

Para quienes no tienen aún definido su voto, propongo algunas consideraciones que pueden servir para tomar una decisión. Me refiero fundamentalmente a la elección presidencial. Teniendo en cuenta que habrá un doble turno, desde ya se pueden descartar aquellos candidatos que no tienen posibilidad de pasar al balotaje, con lo cual la opción queda reducida a tres o máximo cuatro postulantes. Nunca se elige lo óptimo, sino más bien el bien posible o, a veces, el mal menor.

En estas pocas líneas me centraré en los principales temas de la agenda pública del próximo año, en el entendido que el país vive una etapa de transformaciones que cubrirá el próximo mandato presidencial. El principal criterio para tener en cuenta es la capacidad de cada postulante y sus equipos para gobernar en tiempos difíciles: junto con acertar el rumbo que debe tomar el país, se debe evaluar su capacidad para sortear las dificultades.  

Los principales desafíos del país se pueden sintetizar en 20 temas fundamentales:

1.- Reactivar la economía creando empleos, poniendo énfasis en las transformaciones que derivan del nuevo escenario internacional, lo que supone agregar valor a la producción y a los servicios.

2.- Recuperar gradualmente el equilibrio fiscal y controlar la inflación.

3.- Fomentar el ahorro y la inversión privada y pública.

4.-Impulsar una reforma tributaria que permita sustentar en el tiempo el gasto que traerán consigo las reformas sociales.

5.- Manejar adecuadamente lo que quedará de la pandemia y crear condiciones para enfrentar mejor futuras emergencias sanitarias.

6.- Favorecer la transición hacia una economía y hábitos compatibles con la protección del medio ambiente, siguiendo los compromisos internacionales, tanto en la tierra como en la atmósfera y los océanos.

7.- Iniciar un plan para que Chile se proyecte al futuro y sea puente de América del Sur al Pacífico. Para eso se requiere:

A.- La modernización de los puertos para el comercio exterior y habilitar nuevos aeropuertos internacionales.

B.- Iniciar la doble carretera panamericana hacia el sur y hasta Copiapó por el norte y el desarrollo ferroviario de carga.

C.- Concretar los túneles de conectividad interoceánica con Argentina, y de ahí Paraguay y sur del Brasil, como Agua Negra en Coquimbo y Las Leñas en O´Higgins.

D.- Lograr la conectividad ferroviaria desde Vaca Muerta al sur de Argentina hasta los puertos de la Región del Bio Bío.

8.- Acompañar las deliberaciones de la Convención Constitucional, e implementar la puesta en marcha de la nueva Constitución y sus cambios en un plazo razonablemente acotado, lo que supondrá una nueva arquitectura institucional más descentralizada y participativa.

9.- Cambio de paradigma en la relación del Estado con los pueblos originarios e iniciar un proceso de paz con el pueblo Mapuche, que reconozca sus derechos postergados y permita poner fin a la violencia, como lo hizo Nueva Zelanda con los maorí.

10.- Un plan de emergencia hídrica para establecer un mejor aprovechamiento del agua, priorizando el consumo familiar, mejorando el riego y el uso de plantas desalinizadoras, con una nueva autoridad reguladora y un manejo adecuado de cuencas.

11.- Implementar un nuevo sistema de seguridad social que entregue pensiones dignas incentivando un cambio en la edad de jubilación y un sistema de subsidios a los sectores más vulnerables que asegure un nivel adecuado de vida, especialmente en los servicios básicos y transporte.

12.- Enfocar las migraciones con un criterio de derechos humanos, favoreciendo el aporte que pueden dar al desarrollo del país y su economía

13.- Fomentar la transparencia y probidad en el sector público y privado, con sistemas adecuados de control.

14.- Favorecer el respeto y ejercicio de los derechos humanos de todas las personas, combatiendo cualquier forma de discriminación o exclusión social, implantando la plena igualdad y paridad de género y creando una opción de servicio social para los jóvenes que no estudian ni trabajan ni hacen el servicio militar.

15.- Establecer un sistema de salud capaz de prevenir las enfermedades y de dar respuestas efectivas y ágiles a los que lo requieran independientemente de sus recursos económicos.

16.- Combatir el crimen organizado, en especial el narcotráfico, y alcanzar niveles crecientes de seguridad en todos los barrios.

17.- Renovar el sistema educacional para hacer efectivo el acceso universal y la calidad de la enseñanza, poniendo al día el currículo y los métodos pedagógicos, y garantizar un aumento en la cobertura gratuita de la enseñanza superior.

18.- Ordenar el desarrollo urbano en favor de una vida más armónica.

19.- Fomentar la ciencia y la tecnología mediante una colaboración eficaz público-privada con participación de las universidades.

20.- Incentivar todas las manifestaciones artísticas y culturales con apoyo público. (El Líbero)

José Antonio Viera Gallo

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