Las dos Cámaras del Parlamento del Reino Unido aprobaron este sábado en sesión extraordinaria una ley para nacionalizar la empresa British Steel, hasta ahora en manos del grupo chino Jingye.
La denominada Ley de la Industria Siderúrgica ha sido aprobada primero en la Cámara de los Comunes y posteriormente en la Cámara de los Lores, por lo que solo falta la promulgación formal del rey Carlos III para su entrada en vigor.
Durante la votación hubo manifestaciones del personal de la empresa, que impidió incluso a los ejecutivos de la compañía china acceder a la sede del Parlamento, según informa el diario británico The Independent.
Desde el Gobierno han defendido la necesidad de habilitar al Ejecutivo para asumir la dirección de las empresas siderúrgicas británicas, “lo cual utilizaremos para proteger la planta de Scunthorpe”, ubicada en el noroeste del país.
A finales del pasado mes de marzo British Steel anunciaba el inicio de las consultas sobre el cierre de sus dos altos hornos, la planta de producción de acero y la reducción de la capacidad de laminación de acero en la localidad inglesa de Scunthorpe, amenazando la continuidad de hasta 2.700 puestos de trabajo.
Jingye indicó entonces que, desde 2020, ha invertido más de 1.200 millones de libras esterlinas (1.569 millones de dólares) para mantener las operaciones en un contexto de inestabilidad productiva y pérdidas financieras de alrededor de 700.000 libras (915.000 dólares) diarias.
A pesar de estas inyecciones de recursos “los altos hornos y las operaciones de producción de acero ya no son financieramente sostenibles”, declaró la empresa china, apuntando a las difíciles condiciones del mercado, la imposición de aranceles y los mayores costos ambientales relacionados con la producción de acero con alto contenido de carbono.
En este sentido, la compañía recordó que había solicitado el apoyo de las autoridades británicas, pero “tras muchos meses de negociaciones” no lograron ningún acuerdo, por lo que tomó la decisión de consultar con los empleados y considerar propuestas para cerrar los altos hornos, aunque aseguró que seguiría colaborando con el Gobierno del Reino Unido para explorar otras opciones. (Bio Bio Europa Press)